Vitoria. A Dusko Ivanovic le costaba enlazar las palabras para justificar lo que acababa de suceder minutos antes. Después de una nueva y dolorosa derrota, el entrenador montenegrino era consciente de que su equipo atraviesa uno de los peores momentos que se recuerdan. Pese a todo, prefirió pedir un poco de positivismo al entorno baskonista para poder recuperar el carácter perdido hacer ya demasiado tiempo. "Cuando pierdes así seguro que no estás bien, pero es el momento de estar positivos. El sábado todo el mundo tiene que apoyar y animarse", solicitó el técnico balcánico después de valorar el varapalo sufrido ante el Lietuvos Rytas.
"El partido se nos ha escapado porque no hemos defendido bien, pero sobre todo porque algunos jugadores han jugado sin confianza. No sé si con miedo, pero sí sin esa confianza necesaria para poder jugar tranquilos", resumió un Ivanovic de nuevo enfadado por la enrome diferencia entre balones perdidos y recuperados y, especialmente, por haber encajado la friolera de 34 puntos en el último cuarto del partido.
Ivanovic también admitió que la escuadra azulgrana no atraviesa por su mejor momento de juego, ni mucho menos, pero aseguró que continúa creyendo en sus pupilos. O al menos en la mayor parte de ellos -"no todos tiene la misma capacidad de sufrimiento", valoró-.
"Yo creo en mi equipo y creo que mi equipo cree en mí, pero no lo sé. Este año es evidente que tenemos que sufrir para poder ganar los partidos y para ganar algo, vamos a tener que sufrir mucho más que en años anteriores para ganar algo", concluyó Ivanovic antes de mantener que la entidad vitoriana no va a acometer a corto plazo el fichaje de ningún jugador.