Dusko Ivanovic era plenamente consciente de la tremenda importancia del triunfo que su equipo logró ayer contra el Unicaja. En un grupo como el que el sorteo deparó al Caja Laboral, con el Lietuvos Rytas como cenicienta y el Panathinaikos como ogro, el conjunto andaluz se presentaba como principal enemigo en la pugna por los cuartos de final. Por eso, el entrenador montenegrino no tuvo reparos en admitir que estaba "contento" con el trabajo desplegado por sus pupilos. Al menos en líneas generales.
"Estoy contento porque hemos tenido la intensidad defensiva que necesitábamos en los últimos partidos que hemos jugado. Hemos defendido bien ciertas situaciones y eso ha sido clave para la victoria", resumió Ivanovic antes de centrarse en el apartado que más le disgustó: los balones perdidos. "Otra vez hemos perdido balones sin ninguna necesidad, y en partidos como éste hay que jugar sin perder ningún balón porque eso da confianza al otro equipo. Y la falta de confianza del otro equipo es algo muy importante en estos encuentros", recordó el preparador balcánico, que no quiso perder la oportunidad de alabar el trabajo de Esteban Batista, aunque acto seguido animara al pívot uruguayo a dar mucho más de lo mostrado ayer -10 puntos y 14 rebotes- frente al cuadro de Chus Mateo. "Ha jugado bien en defensa y en rebote. Todavía no está jugando en ataque cerca del aro como esperamos que pueda jugar. En todo caso, su aportación nos ha ayudado, pero tiene que jugar mucho mejor", subrayó Ivanovic sobre el último y flamante fichaje baskonista.
Ahora, gracias al importante triunfo cosechado en Málaga, el rumbo hacia los cuartos de final se atisba diáfano en el horizonte azulgrana. "En este grupo, con seis partidos, ganar el primero fuera te da confianza, pero si te confías demasiado puedes ir abajo", advirtió finalmente Dusko Ivanovic. Por su parte, Marcelinho Huertas -ayer en su faceta más anotadora con 19 puntos- agradeció el "espíritu de lucha" desplegado por la escuadra vitoriana. "Hemos luchado y nos hemos ayudado entre todos . Ése tiene que ser el espíritu que no nos debe faltar ningún día", aseveró. Además, el base apuntó como aviso a navegantes que "a veces hay que saber mantener la posesión para alargar los ataques aunque no metamos en lugar de forzar un tiro para regalarles el balón".