Vitoria. Después de jugar doce minutos frente al Bizkaia Bilbao Basket apenas dos días después de serle diagnosticado un esguince de rodilla, no parece que Stanko Barac vaya a tener muchos problemas para estar a disposición de Dusko Ivanovic en un partido mucho más importante como el de mañana ante el Zalgiris Kaunas. Ayer, el pívot croata entrenó junto al resto de sus compañeros en la sesión de trabajo vespertina y, salvo sorpresa de última hora en forma de recaída, el jugador azulgrana viajará hoy con la expedición baskonista rumbo a Lituania. Ataviado con una vistosa rodillera, Barac podía haber disputado más minutos el pasado domingo en Miribilla, pero quedó relegado al banquillo por decisión técnica, como el propio Ivanovic explicó tras el encuentro, como consecuencia de sus prematuras cuatro faltas y el deseo del técnico balcánico por acabar el choque con cuatro pequeños sobre el parqué.

pau ribas y marcus haislip Antes de iniciar el entrenamiento, Pau Ribas y Marcus Haislip anticiparon algunas de las claves del enfrentamiento de mañana ante una escuadra lituana que ya sorprendió a los vitorianos en el Buesa Arena al imponerse 88-92. "Aquí en Vitoria ellos salieron muy agresivos. Les dejamos jugar y ellos lo supieron aprovechar bien. Allí nosotros debemos salir igual, muy duros, para tener nuestras opciones si al final del partido las cosas van igualadas", auguró un Pau Ribas que pasa por uno de sus peores momentos de juego desde que aterrizó en el conjunto baskonista.

A falta de dos jornadas para el final de la primera fase de la Euroliga, el jugador catalán quiso recordar que "el año pasado también sufrimos lo nuestro para pasar al segundo grupo". "Quedan dos partidos, con dos victorias pasamos seguro y vamos a ir a por ello", subrayó Ribas antes de matizar que "los equipos grandes lo son cuando responden a las expectativas, por lo que si un equipo pierde muchos partidos en la primera fase es que no está jugando bien y no merece pasar de grupo".

Por su parte, Marcus Haislip, al que la suerte respetó en Bilbao y no recibió ningún golpe en la boca que reabriera su herida interior, también destacó que el duelo en Kaunas "es un partido importante porque jugamos para seguir vivos" y restó relevancia a la racha de derrotas que ha golpeado al equipo. "Esto es baloncesto. A veces tienes un par de partidos malos y tienes que dar lo mejor de ti para cambiar", incidió.