Fue el primer fichaje y también ha sido el primero en sufrir los estragos de la pretemporada.¿Cómo está su rodilla? Está bien, no es nada serio. Sólo un pequeño golpe sin importancia que me ha obligado a estar al margen unos días. Pero ya he vuelto a los entrenamientos.

¿Qué tal lleva sus primeros días como jugador del Caja Laboral? Bien, aunque todavía estoy intentando adaptarme. Nuevo equipo, un entorno diferente... Siempre es necesario un tiempo para aclimatarse, además de para conocer y entender lo que el entrenador quiere de ti y cómo quiere que juegues. Así que en eso estoy desde hace dos semanas, intentando encontrar mi sitio en todo esto.

¿Está siendo tan duro como esperaba? Sí, está siendo duro. Pero bueno, en realidad supongo que sería así en cualquier parte. En estos días tratas de ponerte en forma y estar centrado en la nueva temporada, y eso siempre cuesta.

Es su primera experiencia bajo las órdenes de Dusko Ivanovic, ¿Empieza a tener buen feeling con su nuevo entrenador? Bueno, tenemos algunos problemas para entendernos porque él no habla muy bien inglés. Pero estoy intentando entender lo mejor que puedo el español a marchas forzadas. Ésa es una de las partes más complicadas para mí de estos días. En cuanto a él, definitivamente es un entrenador duro, es cierto. Pero lo hace porque le gusta ganar, y por eso te exige siempre el cien por cien en todo lo que haces.

Imagino que antes de firmar por el Caja Laboral intentó enterarse de cómo es el estilo de Ivanovic. ¿Qué le habían contado exactamente sobre él? Hubo gente que me dijo que estaba un poco loco, que se pasaba el tiempo gritando en los partidos y ese tipo de cosas que te cuentan (sonríe). Pero la mejor forma de saber si eso era cierto era comprobarlo por mí mismo, porque al final en este mundo todos tienen su propia opinión y no puedes andar pendiente de lo que te dicen los demás. Entre otras cosas, porque no a todos los jugadores les gusta esto de trabajar duro. Así que decidí que me apetecía comprobarlo en persona y por eso decidí venir aquí.

Eso decía Brad Oleson hace unos días. "Trabajar con Dusko es algo que debes experimentar por ti mismo". Exactamente. Estoy de acuerdo.

¿Está siendo una pretemporada muy distinta a la que ha vivido en otros equipos? (Se lo piensa) Sí, sí que está siendo diferente. Por ejemplo, el año pasado en el Prokom jugamos muchos partidos desde los primeros días. El entrenador quería sobre todo que jugáramos mucho. Corríamos y sudábamos, por supuesto, pero sobre todo jugábamos partidos, algo que creo que es muy bueno para tener un buen feeling entre todos los jugadores. Eso es lo mejor en las pretemporadas.

Empezaron a trabajar con apenas cinco efectivos. ¿Se entiende ya con sus nuevos compañeros? Sí, creo que nos empezamos a entender bien. Ellos saben dónde me gusta recibir el balón y lo que me gusta hacer en la cancha, y yo también empiezo a ver lo que les gusta a ellos. Eso es en realidad lo más complicado, adaptarse al juego colectivo. Por lo que veo parece que vamos a tener un gran equipo, aunque es difícil juzgarnos cuando todavía faltan muchos jugadores por venir a Vitoria.

Llega para ocupar un rol que el equipo no tuvo la pasada campaña. Ese killer al que no le tiembla el pulso en los momentos decisivos. Sí. He tenido ese papel desde la Universidad. Nunca he dudado al lanzar un último tiro o al jugarme un uno contra uno si el entrenador decide poner el balón en mis manos. Cuando vine a Europa, al principio me costó adaptarme al baloncesto europeo, pero mis entrenadores empezaron a ver cuál era mi estilo y poco a poco me fueron concediendo ese rol en todos los equipos en los que he jugado. Espero que aquí en Vitoria Ivanovic siga confiando en mí en este sentido.

¿Ha mantenido ya una conversación cara a cara con el técnico azulgrana para hablar de eso y saber lo que espera de usted? No, todavía no. Cuando llegué aquí el primer día me comentó que tendríamos una conversación personal, pero aún no la hemos tenido. Tal vez porque he estado lesionado. Pero espero tenerla pronto para que podamos empezar a mantener una buena relación y sepamos entendernos. Y también para saber cuál va a ser mi rol en el equipo.

Entre otras cosas, cuente con que le pedirá una buena defensa en todos los partidos. No importa, siempre he sido capaz de defender. Hace dos años fui el jugador con más balones robados de la Euroliga. Creo que soy bastante bueno en eso. No tengo ningún problema en defender, siempre que haya un equilibrio entre intentar jugar bien en ataque y en defensa, que es como funcionan las cosas. Querer ganar algunos partidos centrándose sólo en la defensa creo que es muy difícil, porque hay equipos con grandes jugadores en la Liga y es imposible intentar parar a todo el mundo. Por eso creo que debe haber un equilibrio para que todo funcione.

Ha pasado por varios equipos europeos, pero entiendo que para usted fichar por el Caja Laboral es el gran paso de su carrera. Es un gran paso, por supuesto. Desde mis años en la Universidad he intentado siempre avanzar poco a poco en mi carrera, y creo que este es el mayor que he dado hasta ahora. El año pasado hice una gran temporada en Polonia y confío en que ahora pueda ayudar al equipo y seguir creciendo como jugador al mismo tiempo.

¿Cuándo supo del interés azulgrana del Baskonia por su fichaje? Creo que fue en febrero cuando mi agente me dijo por primera vez que el Caja Laboral estaba interesado en mí. Pero no fue hasta finales de abril cuando me presentaron una oferta y tuve el contrato en mis manos.

¿Le costó tomar la decisión? Sí, fue realmente complicado. Le di muchas vueltas y me lo pensé mucho para no tomar una decisión equivocada. Al final decidí aceptarla y espero que haya tomado la decisión adecuada. Veremos.

Creo que el Real Madrid también preguntó por usted. Sí, el Real Madrid mostró interés. Pero querían tomarse su tiempo y el Caja Laboral mostró un verdadero deseo por contratarme, de una forma que otros clubes no quisieron hacer. Además, nunca sabes lo que puede pasar cuando se abre el mercado. Si te tomas demasiado tiempo para pensar una oferta puede que te quedes sin nada, es un riesgo. Hablé con mucha gente para pedirles opinión y al final aquí estoy.