vitoria. Mirza Teletovic atraviesa posiblemente su mejor momento de forma en la presente temporada. Entre él y Splitter habían sumado la mitad de los puntos del Caja Laboral en los últimos cuatro partidos. A falta del brasileño, el balcánico se multiplicó ante el Manresa para convertirse, de largo, en la figura más desequilibrante.
Con 31 puntos, firmó una de sus célebres exhibiciones ofensivas a las que ya ha acostumbrado a la grada del Buesa Arena. Tuvo el lunar negro de las pérdidas, en concreto siete, pero cuando entra en erupción no tiene precio como jugador. Teletovic posee un don primoroso para anotar. Ha nacido básicamente para eso y lo explota en cada partido, siendo sus limitaciones evidentes en otros apartados como la defensa o su defectuosa lectura del juego. Tras su excelente actuación de ayer, se encarama momentáneamente al segundo puesto por delante de Fernando San Emeterio.
Quienes empiezan a reclamar su sitio en el equipo vitoriano son Oleson y Herrmann, dos piezas angulares del proyecto a los que sendas lesiones han retrasado sobremanera su puesta a punto. A punto de iniciarse la pelea por el título, el Caja Laboral va camino de recobrar la mejor versión de ambos. En el caso del argentino, ayer firmó una de sus actuaciones más completas. Anotó, reboteó, se peleó como un jabato y, en líneas generales, estuvo enchufadísimo. Por su parte, el de Alaska no se prodigó en la faceta anotadora, pero a cambio capturó ocho rebotes y fue un perfecto generador de juego al repartir seis asistencias.