Vitoria. Por si las relaciones entre la Euroliga y la ACB no fueran lo suficientemente tensas a raíz de la implantación por parte del nuevo organismo continental del controvertido sistema de licencias fijas para disputar el evento, Jordi Bertomeu salió ayer nuevamente a la palestra para reclamar que las ligas europeas, entre ellas por supuesto la española, no cuenten entre sus afiliados con más de 14 equipos. Igualmente valoró que en Europa "no debería haber más de dos competiciones y 56 conjuntos en liza". Unas medidas que, a juicio del director ejecutivo, tienen su base en "un control del gasto" de los clubes y "el aumento de la calidad" de las competiciones nacionales.

"Si la ACB hace una valoración de que con 18 están mejor que con 14, tendrán sus datos, pero creo que el camino de reducir es el correcto. Estamos viendo realidades y me parece difícil que en la situación actual hagamos las cosas que hace 20 años", señaló quien hace años fuera precisamente uno de los fundadores de la patronal.

Bertomeu abogó por la creación de "sistemas más estables y controlados de competición" en el que "el mérito deportivo no sea el único elemento a tomar en cuenta para clasificarse", en lo que supuso una defensa a ultranza del pasaporte casi vitalicio que tienen cuatro equipos (Barcelona, Real Madrid, Caja Laboral y Unicaja) para disputar la Euroliga de las próximas temporadas con independencia de sus resultados en el torneo doméstico. "Sé que son medidas impopulares, pero me parecen imprescindibles y más en estos tiempos de crisis. Nadie invierte en la ruleta rusa y hay que dar la posibilidad a los equipos de trabajar en proyectos a medio y largo plazo, por lo que hay que planificar, como hace nuestro organismo, en un modelo basado no en lo deportivo exclusivamente y sí en la viabilidad económica", sentenció.

Bertomeu, que espera "que se mueran" las demandas presentadas por la ACB ante la Comisión de Competencia de la UE y el TAS, también confirmó que no habrá más de cinco representantes españoles en la próxima Euroliga. Es decir, si el campeón fuera un club distinto al de los cuatro grandes o el Power Electronics Valencia, reciente campeón de la Eurocup, se quedaría sin el premio gordo de disputar el máximo torneo europeo. "Es una queja en toda Europa de por qué España cuenta con tantos equipos. Al que es subcampeón y no juega hay que explicarle las reglas. Por eso, hay que tener una visión más global. En cualquier caso, tendrá un máximo de cinco equipos en la Euroliga y ocho en competiciones europeas".

Por último, expuso su deseo de contar a medio-largo plazo con un mayor control entre los jugadores que se marchan a Estados Unidos sin haber brillado antes en Europa. "Tenemos una preocupación común con la NBA y es que vayan muchos jugadores de manera precipitada cuando en Europa no han sido todavía relevantes. Hay una larga lista de jugadores que se pierden en el anonimato, se pierden para ellos y también para nosotros", criticó con dureza antes de ensalzar la celebraciónde la fase final de la Eurocup en Vitoria, a su juicio "un torneo para nada menor", y aseverar que "el único camino de la Euroliga es crecer, venga o no venga la NBA".