Vitoria. Una espina clavada. Hora de sacarla. Diez años después. El entonces Pamesa Valencia vio como el Estudiantes le dejaba sin su segundo título copero contra todo pronóstico en la edición disputada en Vitoria en el año 2000. El pasado 31 de enero se cumplieron diez años de la gesta colegial. Hoy el conjunto taronja busca revancha de aquella afrenta. El cuadro ché ya saboreaba el título. Lideraba con solvencia la liga regular y por el camino había dejado a los poderosos Unicaja y Barcelona, por lo que era el gran favorito de una final inédita ante un sorprendente Estudiantes.
Para empezar, los colegiales dieron la campanada apeando al anfitrión TAU por 65-79 y en semifinales al Caja San Fernando (80-65). No se quedaron ahí. Los del Ramiro, con diez jugadores nacionales (los hermanos Reyes, Azofra, Robles, Aísa, Arranz, Muñoz, García, Gonzalo Martínez y Carlos Jiménez) y dos americanos con corazón estudiantil (Shaun Vandiver y Chandler Thompson), no dieron opción a la escuadra levantina (63-73).
Hoy se repite la historia. El Valencia, esta vez dirigido por Spahija, es favorito. El Estudiantes de Casimiro va de tapado. Recuerdos del pasado. Para olvidar en el caso valenciano, con la idea de repetir en el bando madrileño. Otra vez a romper las quinielas. Ése es el objetivo del Estudiantes en el choque inaugural del torneo a partir de las siete.
El Power Electronics, por su parte, pretende lo contrario. Sabedor de lo que pasó hace diez años y de su última derrota ante los colegiales no se fía. Al menos, aunque no al 100% podrá contar con su estrella Rafa Martínez. El escolta mostró su esperanza de poder ayudar al equipo esta tarde. Todo por saldar una deuda.