vitoria. Cuando algo va mal siempre puede ir peor, y en el caso del Caja Laboral parece que esta máxima se está cumpliendo a rajatabla en lo que respecta a las lesiones. Por si las ausencias de Marcelinho Huertas y, a partir de hoy, de Brad Oleson no fueran suficientes, el duelo ante el Ayuda en acción Fuenlabrada culminó con un parte de guerra en el que dos nuevos jugadores baskonistas quedan pendientes de una posible lesión.
Según anunció el propio Dusko Ivanovic una vez finalizado el partido, tanto Tiago Splitter como Lior Eliyahu sufrieron ayer sendos tirones musculares, y quedan a la espera de las pruebas a las que serán sometidos a lo largo de hoy. El problema del pívot brasileño es ahora mismo el más preocupante, a juzgar por los ostensibles gestos de dolor con los que el poste de Joinville se retiró al banquillo en sustitución de Stanko Barac a falta de 2:07 minutos para el final del partido. Splitter se llevó la mano a la pierna izquierda mientras sus compañeros le miraban preocupados. El pinchazo le llegó tras permanecer en el parqué durante casi 32 minutos, practicamente sin descanso.
Por su parte, el problema físico sufrido por Lior Eliyahu pasó más desapercibido para el público presente que el del capitán baskonista. Tras disputar sólo siete minutos en la primera mitad, el ala-pívot israelí permaneció inédito durante toda la segunda parte, aunque de nuevo su endeblez defensiva no le auguraba una gran participación en los dos últimos cuartos. Ambos jugadores serán sometidos hoy a diferentes pruebas médicas para conocer si podrán ser de la partida en el importante duelo del jueves ante el CSKA de Moscú, para el que la presencia de Huertas aún permanece en el aire. "Habrá que esperar. Mañana (por hoy) sabremos más sobre los tres", se limitó a comentar Ivanovic.