A medida que el crecimiento de la ciudad se fue consolidando con el paso de las décadas, se empezó a ver la silueta del scalextric como un serio obstáculo que frenaba esa expansión. Además, la desaparición de las grandes fábricas y la creación de un centro comercial como El Boulevar fueron también factores que llevaron a determinar el derribo de todos esos viales. En agosto de 2002 se cerraron las tres décadas de servicio del paso elevado y el comienzo de una demolición por fases para diseñar también la nueva Vitoria por su zona norte. Las obras se extendieron por un periodo de dos años y supusieron una inversión global de 17 millones de euros. El barrio de Zaramaga se sometió a un proceso de transformación de imagen, ya sin la sombra de ese paso elevado, la excavación de dos puentes, la construcción de un bulevar con seis carriles y la creación de accesos al nuevo centro comercial que ocupó el espacio de la desaparecida planta de Sidenor.

El 1 de agosto de 2002 comenzaron los dos meses de trabajo para derribar la parte central del scalextric. En septiembre se dio paso al derribo de las rampas y la siguiente acometida se concentró entre octubre y septiembre de 2003, con la construcción de un túnel en la rotonda del cementerio de Santa Isabel, en la confluencia de Juan de Garay, Avenida del Cantábrico y Portal de Arriaga. La última fase del plan de renovación se extendió entre noviembre de 2003 y mayo de 2004 para rematar el proyecto, con la construcción del túnel en la calle Madrid, que ejerce la función de relevo del scalextric.