Tras alcanzar el primer mes en servicio del nuevo sistema de bus eléctrico, BEI, el Ayuntamiento de Vitoria plantea meter la directa para lograr en un plazo de ocho años disponer de la totalidad de la flota de Tuvisa con vehículos híbridos o eléctricos.

Así lo ha esbozado esta mañana el alcalde, Gorka Urtaran, durante su habitual comparecencia de los viernes y ha marcado además las diferentes etapas que se deben ir cumplimentando dentro de esa transformación a la que se aspira a llegar en hora en el año 2030.

El 50% de los desplazamientos sobre modos eléctricos

Como primer paso se desea lograr en el año 2023 que el 50% de los desplazamientos en transporte público "se lleven a cabo sobre medios eléctricos, como el tranvía o el BEI", ha desglosado el primer edil.

El segundo escalón debiera alcanzarse en el año 2025 cuando las previsiones municipales se concentran en que la "mitad de la flota de Tuvisa tenga vehículos de propulsión híbrida o eléctrica", ha relatado Urtaran.

De este modo se estaría en condiciones de llegar a esa meta del año 2030 con la totalidad de del 100% de la flota de Tuvisa con vehículos híbridos o eléctricos.

Compra de 3 buses híbridos

En ese recorrido, ha concretado el primer paso a cumplimentar con el planteamiento que se llevará al próximo consejo de Tuvisa para adquirir tres nuevos autobuses híbridos, de 18 metros de longitud, y que supondrá una inversión de 1.275.000 euros.

Segunda fase de la unidad de carga

Además de los nuevos vehículos también hay que ir acometiendo la infraestructura necesaria como los puntos de recarga lenta de la baterías de los vehículos eléctricos.

Con las obras ya en marcha de la primera fase de la unidad de carga, que se espera terminar el 31 de julio, y con capacidad para 20 buses, ha situado Urtaran en el horizonte de "antes de verano" como fecha en la que sacar a licitación esa segunda fase del centro de carga, con capacidad para otros 20 vehículos más.