Los vecinos de Salinillas de Buradón reclaman el contar en el pueblo con asistencia de médico y enfermería, al menos durante dos días a la semana. Y es que, aunque no son muchos vecinos, la mayor parte son de edad avanzada y no cuentan con un transporte fácil ni para ir a Zambrana, donde se les atendió anteriormente, ni a Labastida, que además comienza a estar saturado por las nuevas altas del padrón.

Ha sido el concejal del PP de Labastida, Daniel García, quien lleva trabajando esta cuestión junto al presidente de la Junta Administrativa de Salinillas, Fernando Uriarte, y a través de ellos se ha buscado el apoyo de la juntera, también del PP, Ana Salazar para poder explicar esta necesidad en Juntas Generales de Álava a través de una moción, que fue admitida a trámite el martes pasado. Explica Ana Salazar cómo en Salinillas de Buradón residen 115 vecinos, que para poder disponer de asistencia médica o de enfermería se tienen que trasladar a Labastida. Hasta no hace mucho se les atendía en Zambrana, pero tras los conflictos que hubo con el edificio donde se ubicaba el consultorio médico, se acordó el traslado de su atención a la localidad de Labastida.

El problema es que ir de Salinillas a Labastida, aunque sean núcleos del mismo término, es bastante complicado y los vecinos, la mayoría de edad avanzada, no cuentan con unas frecuencias fáciles de transporte público. A esto se suma, como explica Daniel García, que el consultorio médico de Labastida está notando ya la presión del aumento de población empadronada. De esta manera, entre unas cosas y otras, los vecinos de Salinillas se encuentran con demoras en la atención o con problemas para llegar a las citas médicas porque dependen de autobuses.

Ante esta situación la Junta Administrativa de Salinillas de Buradón ha enviado una carta al Departamento de Salud del Gobierno Vasco y a la dirección de Osakidetza solicitando la reorganización de los servicios, de manera que en Salinillas puedan contar con un servicio mínimo de médico de familia y enfermería al menos durante dos días a la semana. Además, para facilitar esa decisión, la junta pone a disposición de Osakidetza un local municipal, que apenas necesita unos retoques para poder prestar ese servicio.

Así lo explica Ana Salazar en una moción planteada para su debate en la comisión de Equilibrio Territorial de Juntas Generales. Con esa iniciativa trata de explicar la difícil situación que se le presenta a la población de Salinillas y la necesidad que existe de instaurar este tipo de servicios fundamentales para fijar población en el medio rural, así como para atraer población nueva. A esa carencia, Ana Salazar añade otra que tiene un fácil remedio y con una escasa inversión. Y es que las farmacias no están instaladas en todos los pueblos y muchas veces el tener a mano un conjunto de medicamentos básicos pueden ayudar a solventar situaciones de dolores o incomodidades para los vecinos. Por ello va a sugerir la posibilidad de que se puedan establecer, en las localidades que no cuentan con farmacias, unos botiquines a disposición de los médicos o servicio de enfermería, con productos básicos que se puedan entregar a los vecinos.

Por todas estas razones, a través de la moción presentada se pretende buscar el apoyo de la Diputación de Álava para que los vecinos puedan disponer de un pequeño consultorio médico, al menos dos días a la semana, atendido por un médico de familia y un profesional de enfermería. Y aprovechando esta circunstancia que se inste a la Diputación de Álava a trabajar con el Departamento de Salud y reorganizar la mejora de los servicios sanitarios.