El autogobierno y el Concierto Económico vasco vivieron el 29 de julio una jornada clave de la que salieron fortalecidos con la celebración de la Comisión Mixta del Concierto Económico. Se acordó que las diputaciones forales pasen a recaudar tres figuras impositivas: impuestos sobre transacciones financieras, servicios digitales e IVA del comercio electrónico, que pueden suponer, en el caso de las dos primeras, una recaudación anual en Euskadi cercana a los 220 millones de euros, según anunció el consejero vasco de Hacienda, Pedro Azpiazu. De ese montante, a Álava le corresponden 10,5 millones de euros, calcula el diputado general.

Ramiro González compareció ayer a petición propia en las Juntas Generales, acompañado de la titular de Hacienda, Itziar Gonzalo, para dar cuenta de lo pactado en la reunión de finales de julio e indicó que “si se concretan los 220 millones de euros de recaudación para Euskadi, a Álava le corresponderían 10,5 millones aplicando el coeficiente vertical y los coeficientes horizontales correspondientes”, respondió a EH Bildu.

Además, el diputado general de Álava aprovechó su intervención para poner en valor el contenido de un acuerdo, cuyas conversaciones se alargaron en el tiempo porque se trata de asuntos complejos. No obstante, recalcó que lo más significativo es que lo pactado demuestra que el Concierto funciona y que las haciendas vascas son capaces de adaptarse a los nuevos modelos tributarios.

En la reunión del 29 de julio entre las delegaciones vasca y española se llegó a un acuerdo que contempla la concertación de tres figuras impositivas que estaban pendientes, de manera que las haciendas de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa comenzarán a recaudarlas como “Haciendas integrales reconocidas, acorde a lo establecido en el Concierto Económico”, se dijo entonces. Se trata de un acuerdo coherente con el sistema tributario internacional, que establece que “se tribute allí donde se genera el valor”.

El impuesto sobre transacciones financieras (ITF) o tasa Tobin es un tributo de naturaleza indirecta que grava las adquisiciones de acciones de compañías cotizadas cuyo valor bursátil exceda los 1.000 millones. El punto de conexión para la recaudación del ITF será el domicilio social de las empresas cuyas acciones se adquieren. Por su parte, el impuesto sobre determinados servicios digitales o tasa Google, grava con un 3% los servicios digitales de publicidad en línea, de intermediación en línea y de transmisión de datos. El acuerdo establece como punto de conexión el lugar donde se sitúe el usuario que participa en dichos servicios.

La relevancia del acuerdo entre Euskadi y Madrid es, asimismo, una buena noticia para el Gobierno Vasco también en clave de autogobierno, según destacó el consejero Azpiazu. Un pacto en el que ambas partes venían trabajando con discreción, pero con mucha intensidad desde hace tiempo.

“Demuestra que las haciendas vascas son capaces de adaptarse a nuevos modelos tributarios”

Diputado general de Álava