acen los helados con mimo. Con ingredientes como la mantequilla y el cacao, Ramón cuida los detalles de los helados que llevan su apellido: Breda. En un buen día, pueden vender hasta 600 helados entre las tres heladerías, haga lluvia o sol, son sinónimo de disfrute, ya sea en familia o en solitario. DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA visita las heladerías del centro para conocer los detalles que se esconden detrás de estos delicatessen y cómo están viviendo este verano atípico.

Las materias primas de los helados artesanales son productos naturales y de primera calidad conocidos por todos: leche, crema, huevos, frutas y queso. Di Breda es una heladería tradicional italiana que tiene tres sedes ubicadas en pleno centro de la ciudad, una zona rodeada de comercios, restaurantes populares, pintxos y vinos por donde discurre mucha vida. Sus puertas abren la temporada el 1 de marzo y finaliza el 1 de septiembre.

En una calle céntrica de la ciudad, se podía apreciar una fila de personas esperando con ansias a que Di Breda levantara sus persianas a las 12.00 horas, para poder ser uno de los primeros en degustar sus famosos helados. Entre ellas, se encontraba María Inés Velazco, una clienta habitual que estaba acompañada por su hija Aroa, y que confiesa que lo que más le gusta "son los pedazo de helados que te ponen, son enormes y están muy ricos". Pero estos deliciosos sabores y texturas esconden una ardua labor de Ramón y parte de su equipo, que trabajan toda la noche -hasta las 6:00 de la mañana- para poder preparar el helado del día siguiente.

Para conservar el sabor de siempre y con 42 años de oficio encima, Breda considera que "ante todo hay que comprar el mejor género, la clave es elegir una buena fruta y los ingredientes para formar un buen producto. El secreto está en poner mucho cariño a lo que haces".

"Uno de los mejores maestros que he tenido ha sido mi padre. Luego junto a Amir Malik y Sajjad Malik, vamos a los cursos que hay en italia, en Madrid y en diferentes sitios para aprender nuevas técnicas y saber qué hay de nuevo para ofrecer lo mejor al cliente".

Ferreti

Es otro de los locales más concurridos del centro de la ciudad. En este establecimiento de cocina mediterránea, los vitorianos podrán deleitar su paladar con sus deliciosos helados artesanos, crepes, cafés y pizzas en cualquier momento del año. En este establecimiento cada cliente podrá disfrutar de la "frescura de sus ingredientes" en cualquier momento del día: en el desayuno, la comida, merienda o la cena.

Guillermo Vermuyten, es un heladero artesanal que lleva ocho años regentando el Ferreti. Con una media de 200 visitantes al día, el gelato es uno de sus productos estrella "la diferencia que tenemos con las heladerías que hacen el helado plano es que nosotros lo ponemos en montaña. Esto tiene una lectura, nosotros hacemos el helado así porque no lo guardamos ni lo prefabricamos. Lo trabajamos todos los días".

Vermuyten considera que "un helado recién hecho dista mucho de uno que está fabricado días antes". Este profesional que viene de una quinta generación de pasteleros y panaderos, resalta la importancia de la masa que utilizan en sus productos: "Nosotros realizamos la masa de crepes todos los días en la heladería y en un obrador de pastelería que tengo, fabrico los gofres artesanos y con mantequilla. Eso nos hace tener una carta amplia para poder aguantar todo el año".

Variedad de helados

Y es que sus vitrinas no quieren dejar fuera a ningún consumidor, por eso, tienen distribuido su gelato en tres espacios diferentes y ofrecen opciones para personas con intolerancias alimentarias. De ahí que incorpore en la vitrina uno todos los helados que no tienen galleta -apto para celiacos-; en la número dos, están los helados realizados con base de agua (sorbetes), que permite disfrutar el sabor de diferentes frutas a los intolerantes a la lactosa, entre ellas, la frambuesa, fresa, mango, maracuyá y limón -excepto del coco y la banana que se hace con leche-.

También hay deliciosos helados sin gluten y sin frutos secos con los sabores clásicos de toda la vida. En la tercera sección, están el resto de alternativas que completan los 36 sabores que hay en exposición.