- El Servicio de Viticultura y Enología de la Diputación Foral de Álava, la popular Casa del Vino, da cuenta en su último informe de evolución de campaña de la buena situación sanitaria tanto en la zona de Rioja Alavesa como en la del txakoli de Ayala, aunque sugiere mantener tratamientos frente al oídio y el mildiu.

Tras de un mes de junio con tormentas acompañadas de fuertes trombas de agua y granizo que provocaron daños puntuales importantes y un descenso del potencial productivo por deficiente cuajado del fruto, la primera quincena de julio ha resultado tranquila, sin apenas lluvias y con temperaturas con grandes contrastes: días frescos, incluso fríos para la época, han alternado con episodios de calor con registros muy elevados.

Durante estos 14 primeros días de julio los viticultores se han ocupado de tareas relacionadas con el manejo de la vegetación. Vegetación, por otra parte, exuberante debido a la alta disponibilidad de agua en el suelo. Así, han realizado labores de deshojado, desniete, despunte, espergurado, elevación de alambres o guiado de pámpanos en espalderas, entre otras. Se ha continuado también con la aplicación de tratamientos fitosanitarios, especialmente contra oídio y mildiu. Estas enfermedades amenazaban muy seriamente el cultivo desde primeros de junio pero gracias a la intensificación de tratamientos, con el consiguiente incremento de gastos, hasta la fecha se han controlado. En el caso del oídio aún es un momento de gran sensibilidad, y lo seguirá siendo hasta casi final de mes, por lo que se debe perseverar en la vigilancia y control preventivo. De momento solo han aparecido focos puntuales pero, al haber condiciones para su desarrollo, el riesgo es muy alto, dado además, que una vez que la infección entra en la viña es muy complicado su control.

La polilla está en pleno vuelo de la segunda generación, siendo las capturas abundantes. En caso de que no se hayan utilizado tratamientos alternativos a los químicos (confusión sexual) es preciso combatir esta plaga ya que los daños que causan las larvas, aunque no tan visibles como los de la primera generación, se dirigen a los granos favoreciendo el ataque ulterior de la botrytis. Los tratamientos deben pautarse correctamente estando atentos a su evolución y a la información que se ofrece sobre la fecha en la que las intervenciones son más efectivas. En todo caso los tratamientos deberán ir dirigidos a las dos caras de la cepa para que lleguen al racimo donde se instala el insecto.

Se deben igualmente vigilar los viñedos con relación a la araña amarilla y acariosis. La presencia de la araña amarilla se caracteriza por la aparición de puntos y manchas rojizos en las hojas, la acariosis se manifiesta por la presentación de numerosos puntos blancos en las hojas terminales visibles al trasluz. Es momento igualmente sensible a la presencia de mosquito verde y trips. Los síntomas del mosquito verde son parecidos a la araña amarilla y acariosis. Agitando la vegetación se puede apreciar como los mosquitos echan a volar. Si los daños son visibles conviene tratar.

El viñedo se encuentra en estos momentos entre el estado fenológico grano tamaño guisante y, en los parajes más adelantados, cerramiento del racimo, en línea de lo que viene siendo habitual para estas fechas. Los fuertes calores de algunos días y el frío de estos últimos han ralentizado el desarrollo, neutralizando el ligero anticipo que llevaba a finales de junio. El estado sanitario es bueno y, en las zonas en los que el pedrisco no ha tenido lugar, se aprecian numerosos racimos alargados y con granos separados, lo que dará como resultado una cosecha dentro de la normalidad e incluso abundante. En el tercio oriental los rendimientos serán más moderados que en el resto de Rioja Alavesa, no solo en las áreas más castigadas por el pedrisco.

La Casa del Vino también da cuenta que durante esta primera quincena de julio, en la zona del txakoli alavés, las precipitaciones han sido moderadas y las temperaturas, salvo algún día de fuerte calores, han seguido la tónica de lo habitual del verano en esta zona, lo que han propiciado una evolución y desarrollo normal en el viñedo. El estado fenológico de la variedad más abundante, la hondarrabi zuri, es el de grano tamaño guisante y a la fecha de este informe en el Valle de Ayala se avista una cosecha moderada en volumen. En cuanto a sanidad, las enfermedades fúngicas, enemigos más peligrosos del viñedo, el mildiu principalmente en esta zona, se han ido controlando sin mayores contratiempos. Aun así, lo mismo que en Rioja Alavesa, se debe mantener la vigilancia y control tanto del mildiu como del oídio hasta finales de este mes.

En otro orden de cosas, el Concurso Mundial de Bruselas, uno de los más célebres certámenes internacionales, ha otorgado en su 28º edición la medalla de oro a Orube Crianza 2017, de Bodegas Solar Viejo. Además, tres vinos del grupo bodeguero internacional Ferrer Miranda también han obtenido la medalla de plata: Solar Viejo Reserva, de la DOC Rioja; Valdubón Reserva, de Ribera del Duero; y Finca Ferrer Chardonnay elaborado en Gualtallary en la región de Mendoza en Argentina.

Orube Crianza nació en el año 2015, tras la aparición de Orube Selección de Familia, con el objetivo de democratizar el consumo del vino.

Amigos de Laguardia. La Sociedad de Amigos de Laguardia y el Ayuntamiento de la villa medieval han organizado para hoy y el sábado dos actividades culturales relacionadas con el vino. Una con su soporte, como es el vidrio, y la otra con sus transformaciones químicas para pasar de mosto a vino. La primera se llevará a cabo esta tarde, a las ocho y media, en el patio de las Escuelas, con aforo limitado a 200 personas. Será una conferencia y demostración realizada por los maestros sopladores de vidrio, Emilio Elvira Muñoz y Diego Rodríguez Blanco. La siguiente será mañana, sábado, a las 12.30, en el salón parroquial de la localidad, con entrada limitada a 150 personas debido al covid-19. Será una conferencia de José Luis Priego Bermejo, profesor titular y vicedecano de la facultad de Ciencias Químicas de la Complutense de Madrid y, entre otros cargos, miembro del panel de cata de la DO Vinos de Madrid.