El diputado general de Álava, Ramiro González, ha entregado este lunes en un acto celebrado en el Palacio Europa, acompañado por el diputado de Políticas Sociales, Emilio Sola, los reconocimientos Buenas prácticas en Servicios Sociales en Álava 2021 que concede a las entidades públicas y privadas que colaboran con el Instituto Foral de Bienestar Social (IFBS).

En esta edición se han presentado "récord de candidaturas": 16 proyectos, de los cuales cuatro han sido reconocidos con estos premios con forma de testigo, ya que se pretende que sirvan de relevo para seguir avanzando en la mejora de la calidad de vida, bienestar y cohesión de este territorio histórico.

Llevan el nombre de BeBai, la marca propia que ha creado el Departamento de Políticas Sociales, "como distintivo del buen hacer en materia de servicios sociales en Álava, con el ánimo de motivar a emprender iniciativas novedosas que puedan ser conocidas y reconocidas a nivel general".

En concreto, los cuatro proyectos reconocidos son los de la residencia foral para personas mayores de Oion, el Servicio foral de Prevención Comunitaria, la asociación socioeducativa Ikiriki y la residencia para personas mayores Purísima Concepción de Murgia.

Nuevo modelo de atención

"Hace poco Sola presentaba el nuevo modelo de atención, centrada en las relaciones, el afecto y las emociones, y, precisamente, los 16 proyectos de buenas prácticas que hemos conocido, inciden de modo sobresaliente en tejer relaciones que mejoren la calidad de vida y atención de las personas", ha destacado el diputado general tras participar en la entrega de galardones.

Por su parte, como ha precisado, el diputado de Políticas Sociales, la novedad de este año en el reconocimiento a las buenas prácticas en los Servicios Sociales en Álava radica en la apertura de la convocatoria a un mayor número de entidades e instituciones, las cuales han podido presentar sus actividades, con las que se pretende agradecer el "esfuerzo sin precedentes" que todos los profesionales han hecho en lo que llevamos de pandemia.

Sola, además, ha recordado cómo la pandemia impidió el pasado año celebrar los 35 años del IFBS: "Por eso hoy queremos aportar nuestro granito de arena al trabajo bien hecho llevado a cabo por muchas personas en estos 35 años del IFBS".

Menús texturizados

La residencia foral para personas mayores de Nuestra Señora de las Viñas de Oion ha recibido esta distinción por la implantación de menús texturizados. Como ha aclarado su cocinero, Javier Salazar, este tipo de alimentación va dirigida a personas para personas que requieren una dieta triturada, como los que tienen disfagia (dificultad para tragar) o enfermedades oncológicas, entre otras.

"Con un robot de cocina, moldes de silicona, gelificante easy base, y goma Xantana se ha conseguido preservar el color, sabor y olor del alimento original para mejorar la calidad de vida, garantizar la seguridad, evitando atragantamientos, y mejorando el estado nutricional. Hemos hecho desde primeros platos como ensalada de trigueros, a segundos como bacalao al pilpil y postres, como sandías o torrijas, con un proceso que para nosotros ha sido motivador y muy gratificante", ha expuesto Salazar.

Alcohol en zona rural

El Servicio foral de Prevención Comunitaria también ha sido premiado por su programa Dispensación responsable de alcohol en la zona rural, que en 2018 llegó a 40 establecimientos de Iruña Oka, Agurain y Laguardia y en 2019 a otros 50 de Asparrena, Oion, Urkabustaiz, Zigoitia y Zuia.

"Se nos ocurrió intervenir con profesionales relacionados con la hostelería y comercios para hacer una labor preventivo-educativo, recordando, por ejemplo, la normativa al respecto porque en prevención, sumar es multiplicar", ha aclarado uno de sus responsables, Koldo Castrillo.

Vídeos con los pueblos natales

En el caso de la residencia para mayores Purísima Concepción de las Hijas de la Caridad de Murgia, su directora, Asun Inza Arregui, ha detallado cómo surgió su proyecto Una imagen +que 1000 palabras: "Antes de la pandemia, hacíamos excursiones al pueblo natal de algún residente y ahora aprovechamos la creatividad para cada mes hacer un pequeño vídeo del pueblo de cada residente, gracias a las fotos que nos enviaban la familia, amigos, vecinos... La creatividad se ha convertido en una medicina en estos momentos".

Caballos y entornos reparadores

Por último, Sandra Vadillo, de Ikiriki, ha precisado de qué manera su taller psicoeducativo asistido con caballos y naturaleza dirigido a la infancia y adolescencia, en el que han participado 7 chicas y 8 chicos, de 8 a 18 años de tres hogares diferentes, ha ayudado a paliar los efectos del confinamiento, gracias a la interacción con los animales, y a su bienestar, que se ha generado con el proyecto Entornos reparadores, "un lugar que ha servido de escucha y de compartir lo que les estaba pasando".

Risas

La entrega de reconocimientos ha concluido con Virgina, una clown, que ha puesto con sus risas su particular "labor restaurativa" y quien ha agradecido la labor de los 16 proyectos participantes porque "Álava sale ganadora si cuenta con nosotros".