Con la llegada del buen tiempo se incrementa el número de declaraciones responsables para navegar en la cuenca del Ebro. Actualmente hay vigentes un total de 8.315 declaraciones responsables de navegación, un número muy elevado y al alza.

Durante este año, sólo hasta abril, el organismo ha tramitado un total de 1.108 declaraciones responsables, dato superior para este mes a los tres años anteriores (745 en 2020; 979 en 2019 y 1026 en 2018) y cifra similar a la de 2017.

Una de las razones de este incremento es la modificación de normativa que se aprobó el pasado mes de febrero en la demarcación del Ebro, con una serie de medidas que fomentan una navegación más segura e incrementan la protección de las masas de agua ante la expansión de especies invasoras, principalmente el mejillón cebra (Dreissena polymorpha).

Estas normas fueron consensuadas con las comunidades autónomas de la demarcación donde existen masas de agua navegables (País Vasco, Aragón, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, La Rioja y Navarra).

De los 48 embalses navegables recogidos en esta nueva normativa, 17 están declarados afectados y 11 en riesgo (por su vulnerabilidad e indicios de la especie), quedando en este momento en la cuenca del Ebro únicamente 20 embalses navegables libres de la presencia de mejillón cebra.

De esos 20, las masas de agua más demandas en este periodo que se abre de navegación en la cuenca del Ebro están en primer lugar los embalses de Mequinenza, Ribarroja y Flix (provincias de Zaragoza y Tarragona), seguidos de los embalses de Ullibarri y Urrunaga y la agrupación de Mediano y El Grado y el embalse de La Sotonera (los tres en la provincia de Huesca).

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha intensificado estos meses la atención de consultas entre los usuarios de navegación para aclarar las principales dudas sobre la normativa que se refieren sobre todo al confinamiento de la navegación en embalses libres de mejillón (esta medida ya existía en los embalses afectados o en riesgo): los usuarios sólo pueden elegir un único embalse para navegar con su embarcación durante el periodo que dure su declaración responsable.

Sin embargo, hay excepciones con las que las autorizaciones alcanzan para navegar en dos o más masas de agua. Son los casos de Ullibarri-Urrunaga; Búbal-Lanuza (Huesca); Mediano-El Grado (Huesca); La Peña-Ardisa y el tramo del Gállego entre ambos embalses (Huesca); Calanda - Estanca de Alcañiz (Teruel) y Mequinenza-Ribarroja-Flix (Tarragona).

En todo caso, el protocolo de limpieza se mantiene como una de las principales medidas para evitar la traslación de especies invasoras. Este protocolo se adapta con la nueva normativa. En el caso de los embalses afectados por la presencia de mejillón cebra o en riesgo, se exige la limpieza de las embarcaciones en cuatro casos: la primera vez que se entre en la masa declarada; al salir una vez concluya el plazo declarado de navegación y se cambie de masa de agua; al participar en eventos y competiciones en otras masas y cuando se solicite navegar en otras demarcaciones hidrográficas.

Desde la primera detección del mejillón cebra en el año 2001, el Organismo ha desarrollado medidas para evitar su propagación, en coordinación con las Administraciones competentes en medio ambiente y control de la fauna invasora.

De forma prioritaria se han centrado, dentro de sus competencias, en la regulación de la navegación para evitar que sea un vector de propagación, bien sea con la obligación de aplicar el protocolo de limpieza de embarcaciones y la divulgación sobre el mismo, o mediante el confinamiento de embarcaciones en masas afectadas o en riesgo de estarlo.

48

Son las que jalonan los diferentes ríos que tributan sus aguas en el río Ebro. La petición de permisos de navegación se han incrementado considerablemente este año.