La fábrica de Azucarera en La Bañeza cerró el pasado 30 de abril la campaña del Norte -en la que se encuentran los campos de Álava y Trebiño- de esta multinacional, tras molturar en esa factoría leonesa un total de 295.000 toneladas de remolacha líquida después de 45 días de trabajo. La campaña en ese territorio estuvo marcada por el retraso obligado de su fecha de inicio, por las intensas lluvias presentes en la provincia desde principios de año y las heladas que se produjeron también en el mes de enero.

Previamente, en el primer mes del año, la fábrica de Azucarera en Toro cerró la campaña con 309.864 toneladas de remolacha líquida molturada tras 54 días de trabajo. De esa cantidad, 256.223 toneladas provienen de la superficie arrancada en la sede zamorana, en un total de 2.815 hectáreas. Además, molturó otras 48.060 toneladas procedentes de La Bañeza, sumadas a otras 5.580 toneladas de la planta de Miranda de Ebro.

La primera factoría en terminar la campaña fue, precisamente, la que se encuentra en Miranda de Ebro, una campaña marcada por su corta y rápida duración, 45 días, y que arrancó en buenas condiciones, manteniendo en todo momento el pleno abastecimiento de la fábrica. Una situación totalmente contrapuesta a la de la campaña de 2019, que duró casi 3 meses, fue muy lluviosa y con un arranque en malas condiciones.

Este año, pese a las dificultades originadas por la situación actual debido al covid-19, la fábrica de Miranda de Ebro logró un rendimiento tipo de 97 toneladas de remolacha por hectárea, una cifra razonable que se mantiene en el rango medio respecto a campañas pasadas.

En este caso, con una superficie de siembra de 2.300 hectáreas, repartidas entre Álava, La Rioja, una parte de Navarra y Burgos la fábrica mirandesa recibió y molturó un total de 199.000 toneladas de remolacha, llegando a superar durante algunas jornadas las 5.300 toneladas de recepción cada día en la sede de Miranda de Ebro. Asimismo, alrededor de 5.580 toneladas de remolacha se enviaron a la fábrica ubicada en Toro (Zamora) desde un punto equidistante a ambas sedes.

Iturrieta. Los grupos municipales de EH Bildu en Agurain y Arraia-Maeztu registraron ayer en Vitoria, ante la Subdelegación del Gobierno central, las alegaciones a la declaración de Impacto Ambiental de la central eólica proyectada en los Montes de Iturrieta para pedir su paralización. En un comunicado, los portavoces de EH Bildu en Agurain y Arraia-Maeztu, Raúl López de Uralde y Ruth Ibisate, respectivamente, criticaron que el PNV ha renunciado a presentar estas alegaciones "de manera conjunta" como solicitó EH Bildu en ambos municipios. "Por desgracia, no hemos visto voluntad alguna de colaborar en este proceso. Decíamos que juntos y juntas seríamos más fuertes contra este sinsentido y nos reafirmamos en ello", insistieron ambos.