Vitoria ha aprovechado la mañana para disfrutar de las tradiciones de San Prudencio. Ni el covid ni la meteorología han evitado que cientos de alaveses paseasen hasta el santo.

Las campas, con gran presencia policial, incluso han llegado a acoger a valientes que han llevado algo de comida y bebida para disfrutar respetando todas las medidas de prevención impuestas por las autoridades sanitarias para contener la pandemia.