- Tras años de desencuentros y movilizaciones por parte de los trabajadores del sector bodeguero alavés, ayer, finalmente, se publicó el convenio colectivo pactado entre las partes en el que, entre otras cosas, se recoge la aspiración a que el salario bruto mínimo llegue a los 1.000 euros.

El convenio está firmado por la representación empresarial, SEA Empresas Alavesas, y la representación social, LAB, UGT y CCOO, en la mesa negociadora, y recoge los acuerdos alcanzados el pasado 5 de febrero.

Uno de los aspectos más conflictivos, el salarial, se ha regulado mediante un plus compensable bruto mensual destinado a garantizar 1.000 euros netos mensuales por 15 pagas, fijado ya en el convenio del sector de los años 2016-2018, por lo que ahora queda automáticamente integrado en el salario base de las categorías que lo vengan percibiendo. Hecha esa integración, el aumento salarial pactado es el 4% sobre las últimas tablas salariales existentes, con efectos desde el 1 de enero de 2021.

En cuanto a los retrasos producidos a causa de la falta de acuerdo con el convenio, además de la actualización de las tablas salariales, todos los trabajadores percibirán las siguientes cantidades, no consolidables: por una parte la cantidad resultante de aplicar un 2% sobre su retribución bruta anual del año 2018 según tablas de convenio, a percibir en el mismo momento de la publicación del nuevo convenio en el BOTHA, que se produjo ayer miércoles, para compensar la ausencia de incrementos salariales en el año 2019. Dicha cantidad se percibirá de forma proporcional al tiempo trabajado ese año.

Por otra parte, los trabajadores percibirán la cantidad resultante de aplicar un 1 % sobre la misma retribución bruta anual de 2018 según tablas de convenio.

Asimismo, y entre otros aspectos, el acuerdo recoge que las condiciones económicas previstas en el presente convenio se entienden para una jornada laboral de 1.743 horas de trabajo para cada año de vigencia del mismo. Dicha jornada laboral se distribuirá de lunes a viernes, de forma que queden libres los sábados. Respecto a los trabajadores del campo, su jornada laboral será la misma que la del resto de los trabajadores del sector. No obstante, en el sector de crianza y elaboración será obligatorio trabajar cuatro sábados en jornada de mañana en la época de recolección o vendimia y otros dos sábados en Navidad, siendo la duración de la jornada de los sábados de 5 horas.