El edificio residencial de la calle Correría 62 de Vitoria, el mismo que en el año 2016 tuvo que ser tapiado para evitar la entrada de okupas, luce una gran lona azul de Se vende Y es que ahora este inmueble, que llevaba años vacío y que en su planta inferior acogía la vieja mercería Álava, va a experimentar en breve una rehabilitación integral, que lo transformará en 16 apartamentos de 40 metros cuadrados útiles, de los que solo faltan cuatro por vender. Así lo explica Fincas Armentia, la inmobiliaria que se encarga de facilitar la venta de esta promoción de obra nueva.

El precio de estos pisos de un dormitorio es desde 130.000 euros más IVA, aunque puede elevarse, en función de las vistas, porque los hay que dan a la misma calle Correría o a Montehermoso y su muralla, y de la altura, ya que el inmueble tiene cuatro plantas. "Siempre en la primera planta es más económico y va subiendo su precio, en función de su altura. El más caro, en este caso, serían unos 155.000 euros, el de la cuarta planta exterior, y hay distintas tipologías: desde bajos con jardín frente a Montehermoso a viviendas con terraza o balcones", detalla José Manuel Izquierdo, asesor de Fincas Armentia.

El inicio de sus obras está previsto que empiece "ya mismo. Este mes, si se puede". Y estarían acabados "tras 18 meses de obra pura y dura" más lo que tarde el Ayuntamiento de Vitoria en otorgar la licencia de primera ocupación, "por lo que estaríamos hablando de unos dos años".

Teniendo en cuenta que son apartamentos de 40 metros cuadrados, en un principio van dirigidos a un público joven, que quiera independizarse, y a personas separadas, ya que su adquisición no supone mucho "estrés financiero". Si bien, también están aconsejados "para gente que viene a la ciudad, al juzgado, estudiantes y, en general, a inversores".

En su día este bloque también alojó viviendas y lo que, precisamene, intenta esta promoción, como destacan en esta inmobiliaria, es la de seguir rehabilitando el Casco Viejo "para que poco a poco pueda ir recuperando esa vida que ha perdido".

La ventaja de este portal, como señalan, es que está bien ubicado, en plena almendra y al lado de su muralla medieval, "a tan solo a un minuto a pie del epicentro de la ciudad, en un entorno monumental".

El edificio, como obliga ya toda normativa de obra nueva, viene con ascensor y a cota cero. Como figura en su memoria de calidades, la fachada, dependiendo de la orientación, será en mortero "de altas prestaciones hidrófugo/pintado, con materiales de alta calidad".

Tendrá sistema de calefacción, con caldera de gas natural. Y en cuanto a los revestimientos interiores de los propios apartamentos, tendrán paredes con pintura plástica lisa en color, suelos de parquet laminado, antiimpactos, para "mejorar el aislamiento acústico".

Sus baños y aseos tendrán azulejos "de primera calidad", hasta el techo en paredes, con ducha termostática. Las ventanas serán de aluminio con rotura de puente térmico y acristalamiento por doble vidrio. Las puertas serán de madera lacadas en color blanco. Y su cocina estará abierta al comedor-sala de estar.