- El último informe de rendición de cuentas sobre violencia machista en la ciudad, de enero a diciembre de 2019, cuenta con un apartado específico, del 15 de marzo al 15 de junio de 2020, sobre el efecto del confinamiento por la pandemia.

Y es que, ante las medidas de confinamiento y otras relacionadas con el estado de alarma, el Ayuntamiento ha sido consciente de las situaciones de crisis o conflicto que han podido surgir, así como del agravamiento que ha podido producirse por situaciones de desprotección de personas menores de edad o riesgo para las mujeres y personas LGTBI como víctimas de violencia machista.

La convivencia obligatoria ha podido convertirse en un grave peligro, haber aumentado las situaciones de tensión, así como el riesgo de violencia para quienes conviven o han convivido con sus agresores, por lo que se considera imprescindible analizar lo ocurrido, indican desde el Consistorio.

En esta situación, también se han tenido que reorganizar los servicios y recursos para cumplir con las exigencias sanitarias derivadas del estado de alarma, con el objetivo de seguir ofreciendo atención a las víctimas que sufren violencia machista.

- Efectivos de la Ertzain-tza disolvieron ayer por la tarde en la capital alavesa una protesta contra las medidas restrictivas decretadas por el Gobierno Vasco y por el Gobierno central para evitar la propagación de la pandemia del coronavirus y, posteriormente, se registraron algunos incidentes en la zona.

Según fuentes consultadas por este diario en el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, sobre las cinco y cuarto de la tarde, se celebró una concentración, no comunicada, de alrededor de unos 300 negacionistas en la céntrica plaza de la Virgen Blanca de la capital alavesa.

Los agentes tuvieron que identificar a varios jóvenes y acordonaron la zona para evitar que volvieran a acceder a ella. Posteriormente, se produjeron desórdenes públicos en las inmediaciones del Parlamento Vasco y de la Delegación de Hacienda, con enfrentamientos entre los negacionistas y los efectivos de la Policía autonómica desplegados en varias zonas del centro de Gasteiz.

Durante los incidentes, según las palabras de los mismos portavoces, los responsables de la algarada arrojaron pintura contra la fachada de la Delegación de Educación.