- El objetivo temporal del año 2026 que emerge ahora como probable fecha en la que pudiera estar en funcionamiento el tren de alta velocidad a su paso por Euskadi hizo ayer rebosar el vaso de la paciencia del alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran. Después de admitir su “preocupación” por las palabras expresadas esta misma semana por el consejero de Transportes del Gobierno Vasco, el socialista Iñaki Arriola, respecto a esta cuestión, el tono del regidor vitoriano fue incrementándose hasta aludir a la “falta de voluntad, esté quien esté” que ha supuesto esta cuestión para el Gobierno de turno que haya desempeñado la máxima responsabilidad a lo largo de las últimas décadas. “Se ha primado otras zonas de España”, arremetió Urtaran, recordando cómo Euskadi “está situada dentro del corredor Atlántico y que pasa precisamente por Gasteiz”, expresó con un notable enojo el alcalde desde la sala de prensa del Ayuntamiento.

Después de ver cómo tampoco ha habido una aprobación del estudio informativo de la solución del soterramiento a su paso por Gasteiz durante este mes de octubre, Urtaran puso sobre la mesa su propia idea. “La única alternativa es que se transfiera la obra a Euskadi y se liquide después por la vía del cupo. Si dependemos de la voluntad del Gobierno central este proyecto no va a ver la luz”, espetó. Es una solución que ya se ha adoptado en el tramo que discurre por Gipuzkoa, mediante una encomienda de gestión, que reclamó ayer Urtaran para el trazado que debe discurrir por Álava y Bizkaia y todavía no está ejecutado en una gran parte.

La comparecencia de ayer de Urtaran sirvió también para su posicionamiento después de que el Tribunal superior de Justicia del País Vasco apoyara los argumentos del Consistorio para aplicar un ERTE en Tuvisa en Marzo. Esa resolución lleva al conflicto a una nueva situación, aunque “de momento no se va a aplicar el ERTE en Tuvisa”, tranquilizó Urtaran. Sí que aludió a un problema donde aprecia “mucha testosterona y poco raciocinio”, aludió el regidor a la hora de referirse al nivel de enquistamiento del problema.