VITORIA - La campaña general de vacunación contra la gripe ha arrancado esta mañana en Álava con normalidad y sin aglomeraciones. Cientos de pacientes encuadrados en los grupos de riesgo frente al virus, especialmente mayores de 65 años y personas con patologías crónicas, han cumplido ya con el trámite de acercarse a alguno de los centros de vacunación habilitados este año por Osakidetza de forma excepcional debido a la pandemia.

En el caso de Gasteiz, los centros cívicos de Iparralde, Aldabe, Abetxuko y Lakua, los centros socioculturales de mayores (CSCM) de El Pilar y San Martín y el multiusos Iradier Arena. Los pocos, como es el caso de los vecinos de Lakua-Arriaga, se vacunarán normalmente en su centro de salud durante toda la campaña.

Por el Iradier Arena, el centro externo más grande de todos los habilitados en la capital para esta campaña, pasarán a diario entre 650 y 700 pacientes de las zonas este y sur de la capital alavesa, concretamente de los centros de salud de Aranbizkarra I y II, Salburua, Olaguíbel y Olarizu. Osakidetza ha optado este año por citarlos de forma “proactiva” y priorizando a aquéllos que acostumbran a inmunizarse todos los años.

“La gente está siendo muy ordenada y está contenta en general. Parece que les ha gustado el sitio”, ha asegurado Ana Izquierdo, adjunta de Enfermería en la OSI Araba, en declaraciones a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA mientras visitaba este recurso. Osakidetza ha fijado un horario continuado para la vacunación de 9.00 a 19.30 horas, aunque las citas han arrancado hoy un poco más tarde, a las 10.00, para poner todos los sistemas a punto.

Los pacientes están acudiendo al multiusos gasteiztarra en un constante goteo. La entrada está situada en la puerta dos. Todos ellos, tras cumplir el ritual de desinfectarse las manos con gel hidroalcohólico, van pasado por el puesto de vacunación que les corresponda de los cuatro que hay habilitados, donde se encargan de la vacunación profesionales de la enfermería de las zonas de salud asignadas.

Con una cadencia aproximada de un paciente por minuto, apenas se ha formado alguna pequña cola durante la mañana. “Ha sido inusualmente rápido. Fantástico”, ha calificado el proceso uno de las decenas de pacientes que han pasado por el Iradier Arena.

“Al ser la primera vez que coincide con una infección importante, hay que intentar que se vacune la mayor parte de la gente. De tal manera que, si coinciden en los síntomas, al menos se pueda descartar que la gente se coja la gripe”, ha apuntado, mientras tanto, Izquierdo, incidiendo en esa necesidad de llegar este año, como poco, a toda la población riesgo.