- La diputada de Desarrollo Económico, Innovación y Reto Demográfico, Pilar García de Salazar, aseguró ayer que la sociedad encargada de impulsar el aeropuerto de Foronda, VIA, deberá “adaptar a la situación actual” el pliego de condiciones del nuevo concurso para atraer vuelos de pasajeros al aeródromo vitoriano, un contrato que en la actualidad, y hasta marzo del año que viene, explota Ryanair. García de Salazar afirmó que VIA “tendrá que partir de la realidad en la que estamos e introducir elementos de flexibilidad ante una posible evolución positiva de la demanda”.

Respondía así la diputada a una pregunta, durante el pleno de las Juntas Generales, del procurador de Elkarrekin Araba David Rodríguez que demandaba información sobre la renovación del contrato en plena pandemia. Se estima que en 2020 el tráfico aéreo puede caer en torno al 70% a nivel mundial, y ese ha sido precisamente el porcentaje de reducción en Foronda en lo que llevamos de año.

En ese contexto toca renovar la explotación del tráfico de pasajeros en un aeropuerto que en apenas un mes va a iniciar la renovación de su terminal, que apenas ha sido objeto de reformas desde que se construyó la instalación, en 1980.

Vitoria International Airport, sociedad integrada por el Gobierno Vasco, la Diputación alavesa, el Ayuntamiento de Vitoria y la Cámara de Comercio e Industria de Álava, preparaba el nuevo pliego de condiciones para sacar a concurso la explotación del tráfico de pasajeros cuando llegó la pandemia y suspendió tanto la actividad aeronáutica como la administrativa.

La idea entonces era que el Ayuntamiento y la Diputación doblaran la aportación actual al siguiente adjudicatario, llegando el primero al medio millón de euros y alcanzando el segundo una aportación de un millón para un convenio que se prolongará hasta 2024.

La debacle del tráfico aéreo, por otro lado, no solo ha afectado al tráfico en Foronda. El sector aeronáutico tiene una fuerte implantación en Álava a nivel industrial, y se encuentra sumido en una preocupante crisis. En ese sentido, David Rodríguez también preguntó a García de Salazar por las medidas que adoptará la Diputación ante esta situación.

Rodríguez recordó que los trabajadores del sector aeronáutico de Álava llevan semanas movilizándose para protestar por la “crítica situación” que atraviesan a causa de la crisis generada por el covid-19, y por la defensa de sus empleos, y recordó que en Álava los puestos directos suman los 1.400 y los indirectos, alrededor de 8.000, informa Europa Press.

Pilar García de Salazar afirmó que la Diputación Foral de Álava “está apoyando y va a seguir apoyando” al sector aeronáutico con programas de ayudas y con el “impulso a proyectos concretos”. Sin embargo, señaló que “junto a estas iniciativas adoptadas desde lo público, las empresas deben prepararse, mejorando su competitividad para afrontar, cuando se produzca, la reactivación del sector y los nuevos proyectos que puedan surgir”.

La diputada de Desarrollo Económico destacó que el sector aeronáutico se encuentra ante una “caída radical e imprevisible de la demanda, una realidad dura, que nos interpela a trabajar y a colaborar activa e inteligentemente entre las instituciones y con el sector. Así lo venimos haciendo desde el principio -añadió-, articulando el diálogo con el Gobierno Vasco, con el clúster Hegan, con las empresas del sector, y activando instrumentos y canales que permitan el mantenimiento y la reactivación de esta actividad”, aseguró.

TRANSPORTE: Relación “fluida” con renfe

Agurain. El diputado general alavés, Ramiro González, afirmó que la institución foral mantiene una “relación fluida” con Renfe y que espera una mejora de las frecuencias del ferrocarril Altsasu-Miranda a su paso por Agurain, como reclaman los vecinos, pero recordó que esta no es una competencia alavesa. Respondía así al portavoz en las Juntas de EH Bildu, Kike Fernández Pinedo, quien acusó a la Diputación de “mirar la rentabilidad económica, pero no la social”, en materia de transporte. El diputado general respondió también al portavoz del PP, Iñaki Oyarzábal, que reclamaba una mayor implicación del Gobierno Vasco, del PNV, con el territorio, en la petición de fondos europeos para inversiones. “En Álava hay mayoría absoluta con un programa de gobierno que recoge las necesidades del territorio”, argumentó González.