- El ERTE es una herramienta laboral adoptada al inicio de la pandemia del coronavirus para evitar despidos en las empresas. Estos expedientes temporales de regulación de empleo posibilitan que los trabajadores perciban su salario en situaciones excepcionales de crisis como la actual en lugar de perder su empleo, como ocurre con los ERE, por ejemplo. Desde marzo, mes que comenzó el confinamiento, el Gobierno, los empresarios y los sindicatos han respaldado esta medida que en Vitoria despuntó tan pronto como el virus y que deja 3.087 expedientes de regulación de empleo aprobados por el Gobierno Vasco en Gasteiz entre el 5 de marzo y el 29 de junio, que afectan a nada menos que 29.124 trabajadores, según los datos aportados ayer por el Ayuntamiento de la capital alavesa.

El concejal de Promoción Económica, Óscar Salazar, cifró en 18.333 los demandantes de empleo inscritos en Lanbide al finalizar el mes de mayo. Y es que, la tendencia del paro evolucionaba claramente a la baja hasta que emergió la covid-19 y la situación cambió radicalmente. Desde entonces, la economía no ha levantado cabeza -tampoco en Vitoria- y los datos de junio son aún peor que los de mayo no sólo en territorio alavés sino en Euskadi, en general, ya que el desempleo ha evolucionado peor el último mes que en el resto del Estado. Igual de negativos son las cifras de afiliación a la Seguridad Social en la era covid-19 para la capital alavesa. Así, en marzo, la cifra de afiliados bajó en 1.601 trabajadores, en abril descendió en 3.898, en mayo subió levemente con 590 nuevos afiliados para volver a caer en junio con la pérdida de 942 afiliados a la Seguridad Social. El concejal Salazar puso estos datos ayer sobre la mesa y recordó que desde el 1 julio ya se pueden solicitar en el Ayuntamiento las ayudas destinadas al mantenimiento del empleo en Vitoria, que este año disponen de 50.000 euros más que en anteriores convocatorias.

Además de estas subvenciones municipales, Gasteiz se beneficiará de los casi tres millones de euros que va a aportar el Servicio vasco de empleo con el propósito de remontar una curva de paro que sigue en caída libre. Otros 830.000 euros llegarán a Vitoria de manos de Lanbide para empleo juvenil. "La realidad del paro juvenil no es homogénea y resulta especialmente grave en esta franja de edad que se enfrenta a la segunda crisis económica en poco tiempo", manifestó Salazar.

A estas alturas de la crisis sanitaria y social provocada por el coronavirus a ningún ciudadano se le escapa que el covid-19 ha repercutido y todavía repercutirá de forma negativa no sólo en las listas del paro sino también en la calidad del empleo. Con los datos sobre la mesa, la radiografía del desempleo en la ciudad es para EH Bildu la de un gran nubarrón sobre las cabezas de los trabajadores. Así lo afirmó su portavoz en el Ayuntamiento de Vitoria, Miren Larrion tras apuntar los datos de parados y afectados por ERTE facilitados por el gabinete Urtaran. "Sólo la mitad de la población activa de Gasteiz -que ya es poca por el incremento del paro- ha logrado mantener en condiciones dignas su puesto de trabajo durante la pandemia", resumió.

Larrion denunció también el aumento del número de familias que, pese a tener un empleo, se ven obligadas a pedir ayudas sociales en el Ayuntamiento porque con sus salarios no llegan a fin de mes, un ejemplo de precariedad laboral que todavía no ha cuantificado el gabinete Urtaran. Sí apuntó Salazar que el pasado año el Gobierno Vasco logró que se transformaran 6.300 contratos, que dejaron de ser precarios, de los 21.000 que revisó.

76%

Porcentaje de trabajadores vascos con contrato indefinido. En el resto del Estado es algo menor (65,7).

79%

Porcentaje de trabajadores que en Euskadi lo hace con un contrato de jornada completa. En el resto del Estado es algo menor (68,6%).