- La consejera vasca de Salud, Nekane Murga, confirmó ayer que el brote de covid-19 detectado hace algo más de dos semanas en el HUA-Txagorritxu, que se saldó con siete casos positivos, se encuentra ya “practicamente cerrado”, al igual que el del hospital bilbaíno de Basurto. La titular sanitaria dio igualmente por “controlada” la situación del foco guipuzcoano de Aia-Orio, pese a que en las últimas horas este rebrote ha dejado un contagio más confirmado con la prueba PCR. En total, la CAV sumó seis nuevos casos de coronavirus hasta las 00.00 horas de ayer, tres de ellos en Álava. Dos en Gasteiz, en las zonas de salud de Aranbizkarra II y Lakuabizkarra, y el otro en Baños de Ebro. La mitad de los positivos se concentró en personas de menos de 20 de años.

Pese a la buena evolución de la pandemia, dos personas más han fallecido tras haber contraído el covid-19 en los últimos 60 días y seis permanecen en las UCI vascas, una menos que en la jornada inmediatamente anterior. 30 personas más han negativizado la enfermedad y el número reproductivo básico continúa a la baja al situarse en 0,81. Desde que el coronavirus irrumpiese en Euskadi hace ya casi cuatro meses, 1.611 personas han fallecido y los positivos confirmados se elevan hasta los 20.917.

Datos aparte, la consejera de Salud mostró su preocupación por la proliferación de festividades que, si bien han sido suspendidas en la inmensa mayoría de los casos, están generando y pueden generar aglomeraciones estos días. “Nos preocupa mucho”, reconoció Murga, quien advirtió sobre los peligros que también tienen las fiestas al aire libre por la existencia de espacios comunes. La titular sanitaria subrayó que hasta el momento los principales focos detectados en la CAV han tenido lugar “en círculos cerrados”, lo que ha permitido cortar rápidamente la transmisión, algo que sería muy complicado si el brote surgiese en una fiesta. Por ello, pidió “responsabilidad” a todas esas personas “que no tienen sentimiento de riesgo” porque pueden llevar la enfermedad, por ejemplo, a sus casas.

Murga recordó también que, de cara a garantizar la seguridad de pacientes y profesionales, los centros de salud se han reestructurado y cuentan ya con circuitos diferenciados para pacientes covid y no covid.

Principios de octubre. El Departamento de Salud trabaja con la previsión de adelantar la próxima campaña de vacunación contra la gripe a comienzos de octubre, un mes antes de lo que suele ser habitual, para detectar “precozmente” qué pacientes que presenten sintomatología respiratoria durante el otoño tienen o no covid-19. Según detalló ayer la consejera Nekane Murga, la coexistencia de algunas alergias y la gripe con el coronavirus “va a dificultar el rastreo” y la diferenciación de los casos, algo que podría evitarse si se logra una amplia cobertura de vacunación. La titular sanitaria informó de que su departamento ha aumentado en un 33% la petición de dosis de vacuna, con lo que aspira a inmunizar contra la gripe a más del 75% de la población de riesgo, diez puntos más de lo que suele ser habitual. Llegando más, por ejemplo, al personal sanitario, al margen de a los colectivos habituales. Murga recordó también que la coinfección de gripe y covid “es posible”, como ya se vio en los compases iniciales de la pandemia, lo cual “puede ser un factor que agrave” la situación de los pacientes. “Es algo que queremos evitar”, remarco.