- El Ayuntamiento de Vitoria decidió ensanchar determinadas aceras de las calles para que los peatones ganasen espacio en la vía pública para pasear. Fue en plena pandemia, cuando los ciudadanos comenzaron a salir a la calle, pero una vez finalizado el estado de alarma, ese espacio ha vuelto a ser para uso del vehículo privado. Ni Elkarrekin ni EH Bildu entienden esta decisión en tanto en cuanto hay que mantener la distancia entre personas.

Por su parte, la edil jeltzale Amaia Barredo explicó ayer que el ensanchamiento de aceras estrechas adoptado por la covid-19 en mayo, con el inicio de la fase cero de la desescalada, se hizo de forma provisional para facilitar el tránsito de peatones en un momento puntual de concentración de ciudadanos en las calles, debido a la restricción de horarios para salir de casa. Sin embargo, una vez concluido el estado de alarma, el gabinete Urtaran considera que la separación entre personas se mantiene en Gasteiz, de ahí que el espacio añadido sea ya para los coches.

No obstante, la edil anunció en la comisión de Movilidad y Espacio público que el ensanchamiento de aceras se mantendrá en la calle San Antonio y en la avenida del Zadorra, aunque sólo hasta final de año cuando está previsto que terminen las obras para prevenir las inundaciones del Zadorra que se están acometiendo. Otras calles importantes de Gasteiz, como Florida o Manuel Iradier no pueden peatonalizarse sin antes dar una solución al tráfico este-oeste. Además, Barredo recordó que pronto comenzarán las obras para peatonalizar 88 calles. La creación de estas supermanzanas de 20 kilómetros máximo de velocidad, por las que sólo circularán los coches para entrar a los garajes, empezará en Judimendi.