- Los cuatro cabezudos de Agurain salieron ayer a las calles de la localidad para felicitar a los txikis de la casa por su comportamiento ejemplar al cumplir las recomendaciones por las instituciones ante la epidemia del coronavirus. "Me acaban de decir los cuatro cabezudos que nos han visitado hoy, La peku, La kondesa, El koitao y El dejau y que os de las gracias a todos, peques y mayores de Agurain, por el gran recibimiento que les habéis brindado, por vuestros aplausos y entusiasmo mostrado. No lo podrán olvidar nunca", explicaba Ernesto Sainz Lanchares, alcalde de la villa, al término de la kalejira que se llevó a cabo a mediodía por las principales calles de la localidad. La comitiva estaba formada por un vehículo municipal, dos vehículos de bomberos y el camión en el que iban los cuatro cabezudos de la localidad. Desde sus balcones decenas de niños y niñas brindaron sus aplausos y mostraron su entusiasmo al paso de la kalejira.

"Me han pedido que me despida de los bomberos, que han iniciado el recorrido con la kalejira, pero que han tenido que salir a apagar el fuego en un camión incendiado en la autovía", apuntaba Sainz Lanchares, al tiempo que se dirigía a lo más pequeños para decirles que "los bomberos también me han pedido que os diga que sienten no haber podido terminar el recorrido, pero lo primero es lo primero, y lo entendemos".

De esta forma, la iniciativa municipal, llevada a cabo por los propios empleados municipales, bomberos y concejales del Ayuntamiento aguraindarra, rompía la monotonía que se ha instalado en la localidad desde que hace un mes se decretara el estado de alarma y se limitaran las salidas de mayores y pequeños a tareas esenciales como ir a trabajar o realizar las compras.

El regidor de la localidad quiso agradecer el gesto "a los cuatro cabezudos y a los empleados municipales, por romper la monotonía de estos días, y por hacer posible un gesto amable en tiempos difíciles, y en este día de Sallurti". Además, aprovechó para pedir "perdón porque se ha averiado la megafonía prevista con canciones infantiles. A pesar de todos los contratiempos, una sonrisa de los peques vale para dar por buena esta experiencia".

La mayoría de los vecinos de la localidad ha recibido con agrado la iniciativa llevada a cabo por el Consistorio con comentarios como "ha sido un gesto muy bonito", "estaban todos en la ventana esperando impacientes" o "muchas gracias por éste ratito diferente". Sin embargo, otros se han mostrado molestos porque la comitiva no ha pasado por todos los rincones de la localidad. "Se han olvidado de los barrios de siempre, no sé por qué dicen que van a pasar por todos los barrios. Ha sido una decepción para los pequeños", comentaba desde su balcón una madre indignada.

Sea como fuere, los cabezudos son una tradición popular que dan color y alegría a los festejos de Agurain. Por este motivo, el Ayuntamiento se propuso acercar a los más pequeños y pequeñas de la casa estas figuras festivas para alegrar y hacer más llevadero el confinamiento en Agurain. La localidad estrenó en 2018 cinco figuras festivas. Se trata de El koitao, El dejau, La peku, La kondesa y Tres en un huevo, en alusión a los motes de los vecinos de las localidades de Alangua, Egileor, Opakua, Agurain y Arrizala.

La kalejira. Coincidiendo ayer con el día de la patrona de Agurain, la localidad celebró ayer una kalejira con sus cuatro cabezudos, que pudo ser vista desde los balcones, para agradecer el buen comportamiento de los txikis durante el estado de alarma.

El alcalde de Agurain explicó así que los efectivos forales tuvieron que retirarse de la kalejira para atender el incendio de un camión.