vitoria - Tras el estado de alarma decretado el 14 de marzo, en España se han sucedido un sinfín de medidas, extraordinarias, todas ellas, amparadas en la situación excepcional que se está viviendo para proteger a los ciudadanos de la propagación del coronavirus. En este sentido el gremio hotelero aún no se había visto afectados por este tipo de medidas restrictivas. Todo esto cambió el jueves cuando el Ministerio de Sanidad, haciendo uso de sus facultades en un estado de alarma, decretó que todo ese tipo de alojamientos tenían siete días, desde ayer, para cerrar sus puertas.

En Álava 14 hoteles se han visto afectados por esta medida. Entre ellos, tal y como informan desde SEA Empresas Alavesas, el Hotel Araba, Arcos de Quejana, Castillo de Collao, Centro Vitoria, Marqués de Riscal, Silken Ciudad de Vitoria, Villa Laguardia y Viura ya han cesado su actividad hasta nueva orden. Los hoteles Holiday Inn y NH Canciller de Ayala, por su parte, cerrarán hoy tras despedir a los cinco huéspedes que aun tenían ayer y, por otro lado, El Boulevard apurará los días con tres personas alojadas en sus instalaciones.

En otra situación se encuentran los hoteles Jardines de Uleta, el Gran Hotel Lakua y el Ruta Europa con ocho, 17 y cuatro huéspedes de temporada. En el caso de los once hoteles anteriores, al no tener este tipo de personas alojadas, están obligados a cerrar en un plazo de siete días, desde el momento en que se estableció la normativa en el BOE, mientras que los que tengan huéspedes estables podrán mantenerse abiertos con las necesarias garantías pero se les prohibirá, hasta nueva orden, alojar o admitir a nuevos clientes.

De esta manera, la fotografía en estos momentos sería que de los 14 hoteles mencionados ocho ya han cerrado sus puertas, dos lo harán hoy, uno procederá a cumplir la orden en los próximas días antes de que finalice el plazo y un total de tres continuarán abiertos pero con la prohibición de alojar a nuevos huéspedes en sus hoteles. Una situación, sin duda, nueva y excepcional.

Desde el Ministerio de Sanidad han afirmado que harán todo lo que esté en sus manos para salvaguardar la salud de todos con el objetivo de frenar la propagación del coronavirus. Por ello, creen que esta medida puede ser clave aunque son conscientes de que no todos los hoteles pueden cerrar sus puertas al completo.

En el primero de los puntos de la normativa aprobada el jueves se explica que queda “suspendida la apertura al público de los establecimientos turísticos”, pero con carácter excepcional estará “permitida la prestación de servicios de vigilancia, seguridad y mantenimiento en estos establecimientos”. En el segundo punto se hace referencia a la temporalidad de los huéspedes y aclara que si en el momento del estado de alarma hubiera alguno “de manera estable o de temporada”, podrán seguir “siempre que sus ocupantes cuenten con las infraestructuras” que necesiten para vivir.

Por último, los puntos tres y cuatro hablan sobre el proceso del cierre, el desarrollo y la ejecución del mismo, situación en la que se encuentran los 14 hoteles citados de la capital alavesa. En primer lugar, el cese de la actividad se producirá en el momento en el que el hotel “se quede sin huéspedes y en el plazo máximo de siete días desde la entrada en vigor de la norma”. Tras esto serán la autoridades competentes del Gobierno Vasco quienes “dicte la resolución, disposición e instrucción”, para cerrar.