Laguardia - El Instituto Cervantes de Nueva York fue el encargado de cerrar el ciclo de catas culturales desarrollado este año en 14 ciudades del mundo, gracias a un acuerdo puesto en marcha entre la Federación española del vino (FEV) y el Instituto Cervantes. Además de comprobar la riqueza y diversidad que existe en el vino español, los asistentes pudieron comprobar el vínculo tan fuerte que mantiene desde siempre con la cultura de nuestro país.

En total, más de 300 personas, principalmente público extranjero interesado en la cultura, el idioma y el vino, han asistido a alguna de las 14 catas celebradas este año en Chicago, Budapest, Berlín, Tokio, Pekín, Shangai, Nueva York, Londres, Moscú, Dublín y Amsterdam.

Las dos últimas citas tuvieron lugar en el Cervantes de Nueva York, con una cata el día 16 de diciembre en la que se degustaron vinos de las bodegas del grupo Matarromera, Bodegas Habla, Alvear, Ramón Bilbao, Marqués de Vargas, Familia Torres, Perelada Chivite, Torello Viticultors, Martín Códax, Jean León, Valdesil, y otra, el día 18, en la que participó una representación de Grandes Pagos de España formada por vinos de Gramona, Belondrade, Cortijo Los Aguilares, Secastilla, Finca Valpiedra, Alonso del Yerro, Pago Vallegarcía, Mustiguillo, San Román, Mas Doix y Valdespino, representantes de varias Denominaciones de Origen, entre ellas Rioja.

Pero además, los asistentes han podido conocer más sobre el estrecho vínculo que existe desde hace años entre el vino y la cultura en nuestro país y que se expresa en manifestaciones tan diversas como literatura, cine, pintura o arquitectura, entre otras muchas. Para ello, gracias a la colaboración del Cervantes, varias de las catas han contado con un coloquio sobre la presencia del vino en la literatura a cargo del catedrático Miguel Ángel Muro o del escritor Andrés Pascual y del periodista Juan Manuel Bellver. - Pablo José Pérez