- Un nuevo capítulo en las decepcionantes travesías del Glorioso lejos de Mendizorroza. El Deportivo Alavés cayó derrotado por la mínima ante la Real Sociedad y, de este modo, el conjunto gasteiztarra acumula un solo triunfo en los trece partidos que ha disputado en su condición de visitante. Es cierto que los pupilos de Mendilibar comenzaron el partido con gran seriedad y tuteando a un rival del nivel técnico de la Real, pero a medida que la tarde-noche fue desarrollándose el conjunto babazorro se desinfló.

El Alavés cuajó por momentos una actuación completa línea a línea, la zaga se mantuvo firme ante las individualidades de Januzaj e Isak y el centro del campo frenó la creatividad de Merino y Rafinha. Sin embargo, el gol es lo que dicta sentencia y el marcador no indicó otro resultado que un desfavorable 1-0. Esta misma derrota es, a todas luces, un nuevo frenazo en el crecimiento clasificatorio del Glorioso, quien tenía ante sí una oportunidad de oro para empatar a puntos con el Granada.

A pesar de que las condiciones fueran idóneas para dar un puñetazo sobre la mesa, el cuadro de Mendilibar volvió a fallar en su asignatura pendiente. El Alavés es incapaz de obtener una victoria lejos de Mendizorroza. Desde la llegada del técnico de Zaldibar al siempre inestable banquillo babazorro el cuadro babazorro no ha cosechado una victoria como visitante. Tan solo se ha obtenido un punto fuera del feudo babazorro, un factor que acusa en exceso el Glorioso. De hecho, la última victoria del conjuntogasteiztarra como visitante data del 23 de octubre, cuando el conjunto dirigido por Calleja venció por 0-2 al Cádiz en el tramo final del partido.

Y es más, el Alavés se postula a estas alturas de la competición como uno de los peores visitantes de la categoría. Con tan solo 6 puntos obtenidos el cuadro babazorro es el segundo equipo que más sufre en los partidos lejos de su estadio, al igual que el Levante y Getafe, dos rivales directos en la inquietante pugna por la permanencia.

En vista de los pésimos resultados obtenidos lejos de Mendizorroza, es lógico que tanto los jugadores como el cuerpo técnico se escuden en alcanzar la permanencia en el infierno babazorro. De hecho, es evidente que la principal fortaleza del cuadro dirigido por Mendilibar reside en el carácter ofrecido como local.

Además de ello, el calendario de los equipos que visitarán el feudo babazorro puede ser esperanzador para la parroquia alavesista. Granada, Rayo Vallecano, Villarreal, Espanyol y Cádiz serán los encargados de calibrar si el Glorioso está capacitado para lograr el objetivo de la permanencia a través de la solidez exhibida su condición de local.

Sin embargo, esa misma apuesta por jugarse la permanencia en Mendizorroza, que no deja de ser un lanzamiento de moneda a cara o cruz, puede concluir de la manera más cruel para un equipo que lleva coqueteando con el descenso durante tres temporadas consecutivas.

No solo el Alavés ha de exhibirse como un fortín en su feudo, sino que en sus visitas lejos de Mendizorroza el cuadro de Mendilibar ha de dar un paso al frente, cuanto antes, para poder obtener unos resultados que apelen directamente a la tranquilidad de una afición que cada dos semanas vislumbra una versión que no coincide con la que se puede ver en el feudo babazorro.

Con tan solo 6 puntos obtenidos, el cuadro babazorro es el segundo equipo que más sufre en los partidos lejos de casa