Tras anunciar la marcha de Tachi al Fuenlabrada y, con ello, habilitar la inscripción de Nahuel Tenaglia, el Deportivo Alavés tiene cerrada ya la salida de otro de sus descartados. En esta ocasión, es Iván Martín quien va a hacer las maletas para abandonar Vitoria-Gasteiz y, según ha podido confirmar este periódico, cerrar su cesión al Girona, que se ha impuesto a los demás pretendientes de Segunda División que habían pujado por hacerse con los servicios del jugador del Villarreal.

El centrocampista bilbaíno, de 22 años, llegó el pasado mes de julio al conjunto babazorro como petición personal de Javi Calleja, y, pese a ser una de las apuestas con mejores expectativas de la secretaría técnica, en ningún momento ha encontrado su sitio ni en el plantel del entrenador madrileño ni en el de José Luis Mendilibar. Una observación, eso sí, más que evidente si se tiene en cuenta que solo ha vestido la camiseta del Glorioso en ocho ocasiones -dos de ellas en Copa- desde que arrancó la presente temporada.

En consecuencia, tanto el propio futbolista como la escuadra groguet han entendido que lo mejor es dar por finalizada su etapa en el Paseo de Cervantes. Sobre todo, a sabiendas de que varios equipos de la división de plata, donde destacó sobremanera con el Mirandés el curso anterior, le han ofrecido un papel protagonista que seguro le permitirá seguir desarrollando esas aptitudes que no ha conseguido explotar en el Alavés.

Curiosamente, una vez se oficialice su cesión al cuadro gironí, Iván Martín va a pasar por un proceso similar al de su compañero Manu García, que, en la campaña 2016-17, tuvo que dejar Mendizorroza en el mes de enero en busca de minutos en otro lugar. Ahora bien, en el caso del asturiano la escasez de oportunidades fue más exagerada, pues, a sus 18 años, se marchó al NAC Breda holandés sin haber podido debutar en la máxima categoría con la zamarra vitoriana.