Es la primera prueba del 2022. El derbi ante la Real Sociedad, esta tarde a las 18.30 horas, es un choque absolutamente trascendental para el Alavés, que espera estrenar con éxito la nueva era Mendilibar. No en vano, ante los albiazules se encontrará un visitante con bajas por la sanción de Oyarzabal y también por los positivos de covid. Aún así, no cabe duda de que la Real llegará a la capital alavesa con la mayor artillería disponible. Por contra, para los de Alguacil el duelo ante el Alavés también es de especial relevancia ya que la mala dinámica del pasado mes de diciembre obliga a los donostiarras a encauzar el rumbo si quieren mantenerse firmes en los puestos europeos.

Se presupone que el cambio de entrenador brindará aires remozados a la plantilla y cambiará la anterior idea de juego de Calleja. Las señas de identidad como la ambición, la intensidad y el fútbol vertical que Mendilibar ha patentado en sus clubes anteriores, sobre todo el Eibar, son algo que los futbolistas del Alavés deben interiorizar cuanto antes. Sin embargo, el hecho de que la última victoria del Glorioso en liga date del 6 de noviembre obliga a que la reacción sea inmediata. El escenario que se encontrará el equipo vitoriano, por tanto, no puede ser más estimulante.

UN BLOQUE UNIDO

La solidez colectiva es algo que se ha de recuperar cuanto antes porque el tiempo apremia. Respecto a los futbolistas que mayor protagonismo puedan acaparar con Mendilibar, es previsible que el papel de las bandas sea relevante. Acostumbrado a plantear un 1-4-4-2 con un doble pivote, jugadores como Loum y Toni Moya han cuajado grandes actuaciones en esa demarcación. Sin embargo, Pere Pons sufrió un esguince en la rodilla izquierda y la Copa África supone un contratiempo para los intereses del Glorioso, ya que el ancla senegalés se perderá cerca de un mes de competición.

En cuanto a los extremos, se antoja indiscutible la continuidad de Luis Rioja desde el carril zurdo. El sevillano se ve como una pieza clave desde la cual generar la presión y después el juego vertical a través de sus galopadas. Sin embargo, la principal duda reside en la banda contraria. Y es que a pesar de que el Alavés disponga de tres jugadores para ocupar el extremo derecho, ninguno entre Edgar, Pellistri e Iván Martín ha ofrecido un nivel que se pueda acercar al de Rioja. Además del lesionado Pons, el uruguayo y Manu García causarán hoy baja ante la Real.

Por otro lado, teniendo en cuenta que el esquema más empleado por Mendilibar es el que apuesta por una pareja de arietes en la vanguardia, queda por ver quién será el acompañante de Joselu. Y es que a pesar de las innumerables rotaciones en la punta, nadie de entre De la Fuente, Sylla y Guidetti ha firmado actuaciones para tirar la puerta abajo. Aun así, cabe destacar que entre los tres atacantes en discordia, el vallisoletano ha sido quien ha ofrecido una sensación de estar un punto por encima que Sylla y Guidetti.

En definitiva, con el fin de ir sentando las bases del objetivo de la salvación es crucial iniciar el 2022 con buen pie y someter a la siempre estética Real Sociedad, un visitante con un centro del campo rebosante de calidad gracias al trío Guevara-Silva-Merino pero también endeble en labores defensivas. Si finalmente se confirma la ausencia de Isak, aquejado de covid-19, el Alavés podrá respirar más tranquilo. Dice un dicho del refrán futbolístico que “a entrenador nuevo, victoria segura” y el flamante conjunto de Mendilibar aspira a recuperar nuevamente la solidez perdida en los últimos tiempos bajo la batuta de Javi Calleja.