El gol se cuece en Ibaia. Y es que de los 320 equipos que conforman la Tercera RFEF, el filial alavesista se sitúa como el conjunto que en mayor número de ocasiones ha visto la portería rival con un total de 21 goles, los mismos tantos que el filial del Real Oviedo. Esta cifra goleadora demuestra el poderío ofensivo que atesora el proyecto comandado por Seligrat, que está llamado a luchar por ascender de categoría y que aún no conoce la derrota después de haber disputado estas primeras fechas con unas sensaciones notables, donde el empate ante el Pasaia ha sido el único traspiés del conjunto gasteiztarra.

Alan Godoy, que no podrá disputar el partido frente al Deusto por acumulación de tarjetas, se postula como el máximo goleador del equipo con cinco dianas y junto al ariete canario se suman la aportación anotadora de Gio Gagua, Marc Tenas, y el desparpajo de futbolistas como Abde, Ropero y Guti, que dotan de verticalidad, un sinfín de registros creativos y un vertiginoso ritmo a la vanguardia albiazul. Sin embargo, el vendaval ofensivo de poco podría servir sin la solvencia que ha demostrado el equipo mediante el trabajo menos vistoso de los zagueros Imanol Baz, Julio Martínez, Tirlea y Abqar; este último en dinámica con el primer equipo.

El Alavés B llega a la novena jornada apenas cinco días después de la victoria lograda ante el Lagun Onak por tres goles a uno, donde los tantos de Baz, Ropero y Marc Tenas guardaron a buen recaudo el botín en Ibaia. Los de Toni Seligrat se mantienen firmes en la cúspide clasificatoria con 22 puntos y tienen hoy desde las 17:00 horas, la oportunidad de seguir aumentando la ventaja respecto a sus pujantes perseguidores.

Por su parte, el Deusto encara este choque tras vencer por 1-2 al Beasain e inmerso en una dinámica positiva de tres partidos seguidos sin conocer la derrota, donde los empates ante el Santutxu y el Barakaldo han permitido a los de Aritza Escandón retomarle el pulso al transcurso liguero. Se sitúan como los decimocuartos en la clasificación, un punto por encima del descenso y con una diferencia de goles de -4 ya que han encajado 13 tantos, frente a los nueve anotados.

Así mismo, Seligrat advierte sobre el rival del Alavés B: “Es un equipo que el año pasado jugó el playoff para ascender, del que continúan 14 jugadores, el mismo entrenador y que además en su casa es fuerte”. El técnico del filial sostiene que sus pupilos tendrán que adaptarse al escenario, ya que el césped artificial y las dimensiones del campo distan bastante de las que el filial albiazul dispone en su condición de local. “Es un equipo que domina su campo y el juego que se ha de realizar allí. Nosotros tenemos que interpretar que las claves del partido residen en nosotros mismos”, explica. “Si nosotros salimos con la máxima ambición y hacemos las cosas como trabajamos, el rival va a tener muy difícil doblegarnos. También sabemos lo contrario, como nosotros no pongamos el cien por cien, cualquier rival nos puede ganar”, concluye un entrenador que ha aportado madurez a una de las plantillas más jóvenes de toda la categoría.