La reciente mejoría del Deportivo Alavés ha estado completamente relacionada con la fortaleza defensiva. Pese a que el conjunto babazorro todavía muestra muchos problemas en varias facetas de su juego, Javi Calleja ha construido ya unos cimientos que, si bien aún son insuficientes para ganar la mayoría de los partidos, van a permitir que sus pupilos compitan ante cualquier rival, que es lo mínimo que la afición albiazul, aterrada con la imagen de su equipo en las cinco primeras jornadas, le pide a los futbolistas que se enfundan la camiseta del Glorioso.

Parte de ese avance en la tarea de resguardar la portería de Fernando Pacheco ha sido gracias a la actuación del centro del campo y, en especial, de Mamadou Loum. Tras la derrota frente a Osasuna, que superó al cuadro gasteiztarra sin demasiado esfuerzo, el técnico madrileño decidió darle una vuelta a la medular y, desde entonces, el pivote senegalés no ha abandonado el once titular. Una decisión arriesgada debido a la inexperiencia del africano en la élite, pero que ha tenido buen resultado, pues el seis alavesista, mediante su brega y capacidad de recuperación, se ha erigido como uno de los hombres más destacados en la destrucción de juego de la escuadra vitoriana.

En ese sentido, buena muestra de sus positivas actuaciones ha sido, por ejemplo, la llamada de su selección, lo que le ha convertido en el único componente de la primera plantilla alavesista con compromisos en este parón. Sin duda, un destacado descubrimiento -el primero de muchos que se tienen que dar para poner buena nota al último mercado- teniendo en cuenta, además, las necesidades del Alavés, que, desde su regreso a la máxima categoría, siempre ha requerido la presencia de un centrocampista de corte muy defensivo en su plantel. El curso pasado, sin ir más lejos, fue Rodrigo Battaglia quien actuó en esa posición tan fundamental en la sujeción del equipo.

Tony Moya

Asimismo, si Loum está logrando adaptarse tan rápido a LaLiga y al Glorioso, es porque uno de sus compañeros hace que todo su trabajo sea más fácil. Aunque llegó para ser una de las rotaciones -y así se vio en las primeras jornadas-, Toni Moya suma ya dos encuentros consecutivos como titular y el senegalés ha encontrado en él a su acompañante perfecto.

Pese al enorme salto de categoría que ha dado este verano, pues venía de jugar en Segunda B con el filial del Atlético de Madrid, el mediocentro emeritense está demostrando que puede ser una pieza muy útil para Javi Calleja. Sobre todo, si a lo largo de esta campaña consigue dar el salto de calidad que exige la Primera División a todas esas jóvenes promesas que se ven obligadas a salir de sus clubes de origen en busca de minutos. Una situación de la que, por cierto, se ha beneficiado en multitud de ocasiones la entidad del Paseo de Cervantes.

En sus dos apariciones en el once inicial, Moya ha complementado las tareas defensivas del futbolista africano y, además, le ha ofrecido a este una opción sencilla de salida de balón, que es donde más se desluce la figura del jugador propiedad del Oporto. Esta aportación del extremeño en la creación se notó especialmente frente al conjunto colchonero, al que castigó con rápidas transiciones hacia Luis Rioja y Mamadou Sylla.

Sin embargo, la continuidad de esta pareja en la medular albiazul no está para nada asegurada. Tras el derbi frente al Athletic en San Mamés, el entrenador babazorro admitió que su Alavés necesita crear muchas más ocasiones si quiere tener opción de sumar triunfos y una de las zonas más sensibles a volver a sufrir variaciones es precisamente el centro del campo. Sobre todo, después del regreso de Pere Pons, que siempre ha sido una opción del gusto del preparador madrileño.

Otras alternativas, en ese aspecto, podrían ser la vuelta de Manu García, Tomás Pina o la de ambos a la alineación, pues la vocación ofensiva tanto del asturiano como del ciudadrealeño -en especial la del primero- es superior a la de los anteriores.

Disponible. La última vez que Pere Pons vistió la camiseta del Deportivo Alavés fue en Mestalla. Desde entonces, el centrocampista catalán ha tenido que ausentarse de las convocatorias de Javi Calleja por unas dolencias a nivel de su aductor izquierdo. Sin embargo, todo indica que esta fase está cerca de terminar. Pons se sumó la semana pasada a sus compañeros y ayer tomó parte en los diferentes ejercicios del equipo, por lo que podría reaparecer en el amistoso que este viernes disputarán el Glorioso y Osasuna en Tajonar. Por otro lado, el técnico babazorro sigue esperando a Lejeune y Edgar, que ultiman su recuperación, y no ha podido contar con Loum, convocado con Senegal.

Cantera. El joven Marcos Ceña, jugador del juvenil B, ha sido convocado por España sub’ 17 para la concentración que tendrá lugar en Alicante, donde se encontrará con su compañero Xanet Olaiz, entre los días 4 y 10 de octubre.