Afrontar una visita a San Mamés siempre es más sencillo tras una victoria. Sobre todo, si ese triunfo fue ante el Atlético de Madrid y, además, significó poner punto y final a un inicio liguero terrorífico. Sin embargo, pese a la buena imagen que ofreció el pasado sábado en Mendizorroza, el Deportivo Alavés sabe que todavía tiene mucho trabajo por delante para seguir progresando y, de esta manera, estar completamente preparado cuando lleguen las fechas clave de la lucha por la permanencia.

Para ello, el principal reto de Javi Calleja en su segunda temporada al frente del barco albiazul es aprovechar las aptitudes de los recién llegados, la mayoría sin experiencia al más alto nivel, para convertirlos en futbolistas de Primera División. Una evolución complicada, sobre todo por el escaso tiempo disponible y la exigencia de la máxima categoría, pero que el técnico madrileño está tratando de llevar a cabo ofreciendo muchos minutos a jugadores como Toni Moya, Loum, Manu García, Pellistri o Miguel de la Fuente, que están llamados a dar al Glorioso esa frescura que lleva pidiendo desde hace ya varios años.

No obstante, este último no es el único desafío que debe superar el entrenador babazorro. Además de llevar a cabo esa transición, el preparador complutense necesita que los baluartes del pasado y los refuerzos contrastados recuperen su mejor nivel y se sumen a la causa. Porque por mucho que los jóvenes den un paso al frente, su ímpetu y esfuerzo será en vano si los indiscutibles no cumplen con las expectativas. Algo que, por ejemplo, ya se dio ante el Atlético de Madrid con Víctor Laguardia, que ofreció una versión de sí mismo a la altura de las que le convirtieron en el káiser del Paseo de Cervantes.

De cara al derbi de esta noche (21.00 horas), en el que se verá si la plantilla gasteiztarra es capaz de mostrar una imagen similar o incluso superior a la de la anterior jornada, Calleja recupera a Javi López, ausente desde la visita a Mestalla debido a unas molestias musculares; y, por el contrario, seguirá sin poder contar con Pere Pons, que ya trabaja con el grupo, Lejeune y Edgar Méndez, a los que se les espera de vuelta con sus compañeros la próxima semana.

Asimismo, la principal incógnita respecto a la formación en San Mamés tiene que ver con la formación, pues el técnico alavesista podría recurrir de nuevo a la defensa de cinco que tan buen resultado le dio frente al Atlético o, en cambio, regresar a la zaga habitual. Además, lo que también será una sorpresa, tal y como admitió ayer el propio entrenador en la comparecencia previa al choque, es el once titular -muy volátil desde el inicio de esta campaña-.

El Athletic, por su parte, empató (1-1) la semana pasada en Mestalla y ahora, en su reencuentro con la afición, buscará resarcirse de la derrota (1-2) ante el Rayo Vallecano. Para ello, Marcelino, que ha sumado 10 puntos en lo que va de liga, tendrá que hacer frente a las ausencias ya conocidas de Núñez y Villalibre. Por otro lado, quienes sí han entrado en la convocatoria rojiblanca son Yeray, inédito esta temporada, y Sancet.

La última visita del Alavés al feudo bilbaíno fue muy especial para Javi Calleja. Aquel día (10/04/2020), el preparador madrileño debutó con el Glorioso y, además, lo hizo con un empate (0-0) que sentaría las bases para la posterior racha de resultados que permitió a la escuadra vitoriana conseguir su quinta permanencia consecutiva en Primera.

Para encontrar la última -y única en la máxima categoría- victoria albiazul en San Mamés, hay que echar la vista atrás hasta el curso 2005-06, cuando Nené y Bodipo (0-2) silenciaron la Catedral.