La ausencia de un diez, ese jugador que, a través de su talento y visión con el balón, es capaz de unir ambas fases del juego y decidir cómo transcurren las acciones ofensivas, ha sido una de las carencias más importantes del Deportivo Alavés en las últimas temporadas. Algunos futbolistas, como Camarasa, Burgui o Jota Peleteiro, intentaron ocupar ese puesto, pero el rendimiento que ofrecieron no fue el esperado y eso obligó al cuadro babazorro a reinventar su juego en busca de fórmulas que, pese a restar importancia al centro del campo en su faceta de elaboración, le permitieran conseguir triunfos.

El resultado de ese planteamiento, a la vista está, no ha podido ser más positivo, pues, aunque ha sufrido en ciertos momentos, el Glorioso arrancará en agosto su sexto curso consecutivo en la máxima categoría. No obstante, esto no es suficiente para Javi Calleja. El técnico madrileño, conocido de sobra por su estilo ofensivo y con prioridad por el control del balón, llegó el pasado mes de abril a Vitoria-Gasteiz para salvar al Alavés y, tras conseguirlo con unos números prácticamente inmejorables, ahora, en este nuevo reto que supone la campaña 2021-22, busca reflejar fielmente su idea fútbol en la escuadra de Mendizorroza.

Para ello, eso sí, va a necesitar -además de otros refuerzos- un jugador que sea capaz, como se ha comentado al principio, de conectar el centro del campo con la delantera. En ese sentido, Sergio Fernández lleva ya varias semanas sondeando el mercado en busca de una incorporación que, aparte de cumplir con ese perfil, se ajuste a las limitadas posibilidades económicas de la entidad del Paseo de Cervantes.

Por tanto, el club gasteiztarra va, en principio, tras un jugador joven que quiera hacerse un hueco en Primera División y que pueda llegar en calidad de cedido. Asimismo, si es polivalente, mejor aún. Con este fin, uno de los primeros nombres que salieron a la palestra fue el de Iván Martin. Tal y como informó este periódico, el Alavés ya le ha trasladado una oferta al Villarreal para contar con sus servicios durante el próximo curso, pero el cuadro groguet ha decidido aplazar su respuesta hasta el mes de agosto, cuando Unai Emery decida mantenerlo en la primera plantilla o no, a tenor del rendimiento en pretemporada del bilbaíno, por el que también han movido ficha más equipos.

Otro centrocampista por el que se ha interesado el Glorioso, aunque, en este caso, todavía sin oferta firme de por medio -según ha podido confirmar este diario-, es Sergio Arribas. En esta línea, fuentes cercanas al jugador valoran muy positivamente la opción de que el madrileño siga los pasos que en su día tomaron otros futbolistas hoy importantes como Marcos Llorente, actualmente en el Atlético de Madrid, o Theo Hernández, claro protagonista en la banda izquierda del Milán.

Arribas, de 19 años, dio sus primeros pasos en el Pérez Galdós y en el Leganés. En 2012 fichó por el Real Madrid, que le permitió seguir su formación en la Fábrica, y fue quemando etapas hasta llegar al primer equipo juvenil, con el que se proclamó campeón de la Liga Juvenil de la UEFA. La temporada pasada dio el salto al Castilla, con el que ha disputado 15 partidos a las órdenes de Raúl González, y, además, debutó oficialmente con el conjunto blanco en Primera División (127 minutos) y en la Champions League (30’).

Asimismo, en lo referente a lo estrictamente futbolístico, el joven madridista puede ocupar cualquier posición ofensiva del centro del campo e, incluso, ha actuado en alguna ocasión escorado a la banda derecha al igual que hizo Jota el curso pasado.

Si finalmente los albiazules consiguen incorporar a Iván Martín, Arribas o algún otro jugador de características similares, Calleja podrá barajar opciones alternativas al uso de las bandas, tan característico con Abelardo, o al juego directo en busca de Joselu tan recurrido en las dos últimas temporadas.

Dadas las condiciones económicas del Glorioso, las opciones de incorporar un jugador de este perfil pasan por una cesión

El entorno de Arribas ve con buenos ojos que el medio madrileño siga los pasos de jugadores como Theo Hernández o Marcos Llorente