- Uno de los últimos en cruzar la puerta de entrada del Alavés al inicio del curso será el primero en atravesarla para regresar a su punto de origen. Ese parece al menos el curioso destino de Tomás Tavares. El joven futbolista luso, cedido por el Benfica, no ha conseguido hacerse un hueco en la escuadra albiazul, donde apenas ha dispuesto de oportunidades. El relevo en el banquillo vitoriano, además, provoca que el espacio para carrileros puros como es su caso se reduzca. Una concatenación de factores que ha llevado a que todas las partes consideren que la mejor solución es cancelar el préstamo antes de lo previsto. Así, el portugués regresará en breve a su país, donde el Benfica le buscará un nuevo destino en el que seguir creciendo.

Una salida que podría no ser la última que se produzca en el Alavés durante este mes. Porque el director deportivo albiazul, Sergio Fernández, volvió a dejar claro ayer en la presentación de Abelardo que el equipo no podrá acometer ningún fichaje salvo que se produzcan varias despedidas de los actuales inquilinos del vestuario. Jugadores relegados a un segundo plano como Guidetti, Burgui o Adrián Marín son los principales candidatos para ello.