- La última jornada del mercado de fichajes estival -aunque el calendario marcase el 5 de octubre- resultó inesperadamente tranquila para el Deportivo Alavés. Pese a que se esperaba que el combinado de Mendizorroza apurase al límite el plazo de las doce de la noche, lo cierto es que dio por terminada su tarea bastante antes de ese obligado epílogo. De hecho, llevó a cabo un único movimiento durante la jornada de ayer y fue de los que podría considerarse de perfil bajo. Se trata, en concreto, de la cesión hasta final de temporada de Rafa Navarro al Istra croata (propiedad también del club vitoriano).

La marcha del jugador andaluz, que no entraba desde hace mucho en los planes de la entidad de Mendizorroza y cuyo contrato vence el próximo mes de junio, fue la única que se produjo pese a que varios compañeros más se encontraban junto a él en la rampa de salida. Sin embargo, en ninguno de estos casos se dieron las circunstancias necesarias para que la operación acabase viendo la luz verde.

En esta situación estaban, fundamentalmente, Guidetti, Burgui y Tachi. Tanto el sueco como el extremeño despertaron el interés de numerosos pretendientes a lo largo de todo el mercado pero ninguno de ellos estaba dispuesto a asumir el importante salario que ambos tienen firmado con el Alavés, lo que terminó convirtiéndose en un obstáculo insalvable para su salida de Mendizorroza. En consecuencia, permanecerán en la disciplina alavesista al menos hasta la próxima ventana.

Algo parecido, aunque en otra escala económica, ha ocurrido en el caso de Tachi, que tampoco ha encontrado un destino que colmase las aspiraciones de todas las partes implicadas. A este trío de nominados prácticamente desde que se inició el trabajo de pretemporada se ha unido en los últimos tiempos Martin Aguirregabiria, con el que Pablo Machín apenas cuenta.

El vitoriano se ha quedado relegado a un papel totalmente residual -que se ha complicado todavía más con la reciente incorporación de Tavares- en los esquemas del soriano y se ha asomado en el último momento a la puerta de salida en busca de una cesión que le ofreciese los minutos que, al menos a priori, no tendrá en Mendizorroza. Una partida que, finalmente, no ha tenido lugar y que permitirá al gasteiztarra pelear por intentar hacer cambiar de opinión al máximo responsable del banquillo albiazul.

Por lo que respecta al capítulo de entradas, tampoco hubo fumata blanca en las oficinas del Paseo de Cervantes. Con las estrecheces presupuestarias y el límite salarial como principal obstáculo, la secretaría técnico llevó a cabo el acelerón final durante el fin de semana con las incorporaciones, avanzadas por este periódico, de Tomás Tavares y Jota Peleteiro. Ante la imposibilidad de concretar alguna salida importante que aligerase los gastos previstos, Sergio Fernández y su equipo tomaron la decisión de no añadir nuevos elementos al vestuario local de Mendizorroza.

De esta manera, Pablo Machín tendrá que conformarse con los cinco fichajes que ha cerrado el club a lo largo de las últimas semanas. Cuatro cedidos (Deyverson, Battaglia, Lejeune y Tavares) y un futbolista en propiedad (Peleteiro) que terminan de dar forma a una plantilla con veinte licencias profesionales y en la que tendrán un peso significativo los jóvenes (Borja Sainz, Javi López, Abdallahi, Sergi García y Tachi) que pese a disponer de ficha del filial son integrantes del primer equipo a todos los efectos. Una configuración que deja margen de movimiento suficiente en el caso de que sea preciso acometer nuevos retoques en el próximo mercado invernal.

Con Deyverson, Battaglia y Lejeune ya perfectamente acoplados, el siguiente paso será integran cuanto antes en el esquema del equipo a los últimos en llegar. Peleteiro, destinado a aportar la dosis de calidad extra en el centro del campo, ya está en Vitoria desde el domingo y Tavares llegará la próxima semana.

Última salida. La cesión de Rafa Navarro, que acaba contrato el próximo junio, al Istra croata fue el único movimiento albiazul en la última jornada del mercado.

Sin llegadas. Tras echar el resto el fin de semana con las incorporaciones de Tomás Tavares y Jota Peleteiro y ante la imposibilidad de aligerar la masa salarial con nuevas salidas, el Deportivo Alavés no añadió ayer ninguna pieza más a su plantilla.

20

Fichas profesionales tiene el conjunto vitoriano para afrontar este tramo inicial del curso. A ellas se les añaden las de los cinco jóvenes que tienen licencia del filial pero pertenecen al primer equipo.