- El Deportivo Alavés consumó ante el Athletic en Lezama su tercera derrota de la pretemporada en otros tantos partidos, pero el resultado, provocado por dos errores muy graves en un penalti y un balón regalado atrás, no eclipsa la mejoría clara experimentada por el equipo de Pablo Machín. Cierto es que a la hora de la verdad el marcador desvirtúa las sensaciones, pero en este caso hay que dar la prueba por positiva si de ella se saca una experiencia para el aprendizaje. Es evidente que el margen de crecimiento es importante, pero, con un equipo que se puede parecer mucho al que se estrene en Liga contra el Betis, la defensa se mostró mucho más ajustada, los centrocampistas dominaron buena fase del partido y se llegó al ataque con peligro, aunque la puntería falló en exceso en el buen puñado de ocasiones que generó un cuadro albiazul que ha de seguir trabajando para cuando los resultados sean lo importante.

Continuaron las pruebas de Machín, que recuperó el 3-5-2, pero ya planteando un once que se puede asemejar mucho -Pacheco por el ayer regresado Sivera y ver si Duarte tiene sitio entre los tres centrales son los únicos cambios que se pueden esperar- al que sea titular en el partido inaugural de la temporada contra el Betis. Entre otros, con la presencia de un Battaglia que vivió sus primeros minutos como albiazul actuando de pivote y que ya desde las primeras de cambio dejó clara su jerarquía con un intercambio de impresiones con el árbitro tras sufrir una falta no señalada y que propició la primera ocasión del Athletic, un cabezazo alto de Kodro.

El conjunto vitoriano estuvo mucho más serio en el apartado defensivo y en el ataque ha explotó a la perfección los desdoblamientos de sus carrileros para generar peligro. Las bandas son uno de los argumentos fundamentales para el preparador soriano y Edgar por la derecha y Rioja por la izquierda profundizaron hasta la línea de fondo para servir centros envenenados. Así, la defensa rojiblanca, tras un gran internada de Rioja, salvó en primera instancia un remate de Joselu y, ya sobre la línea de gol, Balenziaga despejó el disparo de Lucas Pérez tras el rechace que ya se colaba al ecuador del primer acto.

Tenía el Alavés el partido bastante controlado, con su centro del campo imponiéndose claramente en sus mejores minutos en esta fase de preparación, hasta que el colegiado castigó con penalti un supuesto agarrón de Pina en un saque de esquina. Riguroso cuanto menos y que Muniain transformó en gol desde los once metros a los 29 minutos.

Tras el 1-0, el cuadro vitoriano siguió buscando el ataque, con una doble ocasión de Joselu; primero un disparo que Ezkieta despejó a córner y, en ese mismo saque de esquina, un cabezazo alto. Intento de reacción abortado casi de inmediato por culpa de un grave error de conexión entre Ximo y Ely, que no se entendió un pase hacia atrás de su compañeros y facilitó que Morcillo se quedase solo ante Sivera, al que ha batió en el mano a mano.

2-0 al descanso, tras una nueva ocasión en la que Ezkieta impidió el gol de Joselu, que fue fiel reflejo de que en la élite cada error se penaliza al máximo. Por eso, la mejoría del Glorioso quedó en nada en el marcador, lo que no hace sino servir de experiencia para cuando de verdad los resultados cuenten.

En el inicio de la segunda parte Machín solo realizó tres cambios, entre ellos el reestrenó como alavesista de un Deyverson que no pudo vivir un mejor retorno. Prácticamente el primer balón que tocó, lo convirtió en gol. Un centro desde la izquierda de Lucas que el brasileño cabeceó al fondo de la red para poner el 2-1 en el minuto 50.

Por si quedaba alguna duda, Dey no ha cambiado en nada. Bullicioso y batallador como siempre -no le faltó ni el intercambio de impresiones con otro habitual de todos los charcos como Raúl García-, en un nuevo servicio de Lucas no llegó a enganchar un remate que hubiese supuesto una ocasión muy buena para empatar. La reafirmación de que el Alavés fue mejor que el Athletic en el juego, pero penalizado por su escaso acierto de cara a gol y los dos fallos gruesos que propiciaron los tantos rojiblancos.

De los minutos finales, plagados ya de cambios -e incluso de recambios, pues varios jugadores del Athletic sustituidos volvieron a entrar de nuevo-, lo más destacable fue de nuevo la interesante presencia de un Abdallahi que está dejando claro que tiene hueco en un equipo que sigue sin conocer la victoria en una pretemporada en la que ha sufrido tres derrotas, aunque en estos momentos lo único importante es ajustar de cara al inicio del curso y las sensaciones que ofreció ayer mejoran con mucho a las precedentes.

ATHLETIC Ezkieta; De Marcos (Capa, m. 45), Sillero (Yeray, m. 45), Luengo (Paredes, m. 45), Balenziaga (Lekue, m. 45); Muniain (Serrano, m. 45; y Vencedor, m 76), Vencedor (Dani García, m. 45), Zarraga (Prados, m. 45; y Zarraga, m. 76), Morcillo (Vicente, m. 45); Kodro (Villalibre, m. 71) y Villalibre (Raúl García, m. 45).

ALAVÉS Sivera (Pacheco, m. 45); Laguardia (Tachi, m. 71), Ely (Diéguez, m. 71), Ximo (Duarte, m. 45); Edgar (Martín, m. 60), Pina (Sergi García, m.71), Battaglia (Abdallahi, m. 60), Pons (Blanco, m. 71), Rioja (Javi López, m. 60); Joselu (Deyverson, m. 45) y Lucas Pérez (Borja Sainz, m. 60).

Goles 1-0, minuto 29: Muniain, de penalti; 2-0, minuto 35: Morcillo; 2-1, minuto 50: Deyverson.

Árbitro Sánchez Asla (colegio vasco). Amonestó a Tachi (minuto 84).

Incidencias. Lezama. Puerta cerrada.