- Gerardo Izaguirre es un viejo conocido de la afición del Deportivo Alavés que, antes de vivir su primera experiencia profesional en el Hércules de Alicante en la lejana temporada 1997-98, trabajó cuatro años en el fútbol base del club vitoriano. Junto a Iñaki Ocenda llegó a disputar el play off de ascenso a Segunda División en un plantel que, entre otros, contaba con Sivori y Sukia. Su siguiente experiencia en la entidad del Paseo de Cervantes tuvo lugar en la aciaga campaña 2008-09, saldada con el descenso a Segunda División B y en la que tres técnicos distintos como Salmerón, Mandiola y Javi López fueron incapaces de reflotar a un equipo cada vez menos pujante bajo la presidencia de Fernando Ortiz de Zárate. El consuelo es que en su última etapa en Vitoria sí logró quitarse ese mal sabor de boca. Y es que, cuando estaba punto de renovar su compromiso con el Huesca, recibió la llamada de Javier Zubillaga para integrar el cuerpo técnico de Natxo González en el curso 2012-13. Izaguirre ya había coincidido años atrás en las categorías inferiores del Alavés con el ahora técnico del Tondela luso y el trabajo de ambos resultó básico para el ansiado ascenso a la categoría de plata. La última experiencia profesional de Izaguirre tuvo lugar en el Girona con Eusebio Sacristán. A lo largo de sus 22 años en la élite como preparador físico, Izaguirre también ha militado en otros clubes como el Logroñés, el Ciudad de Murcia, el Xerez, el Rayo Vallecano, el Salamanca, el Nastic de Tarragona, el Celta y la Real Sociedad. Hoy en día reside en Zambrana, una localidad ubicada a 30 kilómetros de Vitoria. / Foto: