EL Sevilla, con siete de los primeros puntos posibles en su casillero, pondrá a prueba la imbatibilidad del Deportivo Alavés. Las victorias a domicilio contra el Espanyol y el Granada y el empate en casa contra el Celta han devuelto la ilusión a los de Nervión, que vienen de dos temporadas de constantes altibajos, en las que Joaquín Caparrós tuvo que coger las riendas del equipo en el tramo final debido al decepcionante rendimiento de Eduardo Berizzo, Vincenzo Montella y Pablo Machín. Este verano, el conjunto sevillista ha reformado por completo la plantilla, que poco tiene que ver con la del curso anterior, y ha dejado escapar a algunos de sus mejores hombres, como es el caso de sus goleadores Wissam Ben Yedder y Luis Muriel, el vertical extremo Quincy Promes, Roque Mesa, Mercado y el guante de Pablo Sarabia, la baja más notable, del que podrán disfrutar en París este curso. Estos movimientos, que habrían sido cuestionados en el pasado por los aficionados, tienen la garantía de contar con la aprobación de Monchi, posiblemente el mejor fichaje del club para esta campaña. El secretario técnico ha regresado al equipo en el que más éxitos ha conseguido tras un periplo de dos temporadas en la Roma en las que su carácter ha chocado con las pretensiones y jerarquía del club italiano, con el que no terminó de congeniar. En la capital andaluza confían ciegamente en él y no dudaron en ofrecerle el timón del club nada más ser destituido, a pesar de haber dejado el Sánchez Pizjuán por decisión propia dos años atrás. Cinco Ligas Europa, dos Copas del Rey, una Supercopa de Europa y otra de España avalan su valía.
El gaditano ha sacado el máximo partido al mercado de fichajes estival y ha concretado un total de diecinueve salidas, entre ellas el préstamo de Aleix Vidal al Deportivo Alavés, y quince incorporaciones. Contrataciones de calado como las de Óliver Torres, Rony Lopes, Koundé, Diego Carlos, Joan Jordán, Ocampos, Luuk De Jong, Fernando, Chicharito o la cesión de Sergio Reguilón han dado una vuelta de tuerca a una plantilla que también cuenta con jugadores más arraigados en Sevilla como Jesús Navas, Carriço, Escudero, Franco Vázquez, Banega, Nolito, el exalavesista Munir o Vaclik, un seguro de vida en la portería. Hasta el momento, Diego Carlos, Reguilón, Fernando, Jordán y De Jong han sido los fichajes que se han hecho hueco en el once, además de Ocampos, uno de los más destacados en el inicio. La gran sorpresa está siendo Nolito, que parecía tener pie y medio fuera de Sevilla pero ha arrancado el curso pletórico, recordando al futbolista que despuntó en el Celta, aunque, por lesión, por estará en Mendizorroza.
La redención de Lopetegui No son pocas las decisiones que ha tenido que tomar Monchi desde su retorno a la capital andaluza, pero la más importante ha sido sin duda la de confiar en el entrenador Julen Lopetegui para liderar este nuevo proyecto. Gran parte del prestigio del técnico guipuzcoano ha caído en picado desde que anunciara su fichaje por el Real Madrid en la víspera del Mundial de Rusia el año pasado, lo que derivó inmediatamente en su destitución como seleccionador. Al ahora técnico del Sevilla se le culpó del mal rendimiento del combinado español en un campeonato en el que su polémica decisión ocupó todas las portadas de la prensa deportiva. Por si fuera poco, su periplo por el Real Madrid fue desastroso deportivamente y fue destituido en la décima jornada de liga. En poco más de cuatro meses, Lopetegui pasó de ser la gran esperanza de la selección por su imbatibilidad al frente del combinado nacional a ser el blanco de las críticas, tanto desde Barcelona como desde Madrid.
De hecho, su fichaje por el Sevilla tampoco sentó bien a algunos aficionados, pero su arranque liguero ha despejado toda duda. Los de Nervión están jugando a un grandísimo nivel y tienen las ideas más claras que nunca, a pesar de contar con muchísimas caras nuevas. Lopetegui está apostando por un 4-3-3 con dos laterales muy ofensivos como Jesús Navas y Reguilón, Fernando sosteniendo el centro del campo y Jordán, Torres o Banega enlazando con los atacantes. El fútbol ofensivo y de posesión es el sello distintivo de este equipo, que tampoco desaprovecha las oportunidades de salir en tromba al contraataque. Poco tiene que ver en cuanto a nombres y estilo de juego con el Levante, el Espanyol o el Getafe, a quienes se ha enfrentado el Alavés hasta el momento. Mendizorroza podrá disfrutar sin duda de un partido intenso, en el que presumiblemente el Sevilla dominará la posesión. Por el contrario, los de Asier Garitano tendrán más espacio para salir en velocidad con Aleix Vidal, Rioja, o el recién llegado Oliver Burke. El duelo entre Pacheco, que sonó para el Sevilla durante el verano, y Vaclik, será otro de los atractivos del encuentro.