Vitoria - Esta noche comienza en Bilbao la temporada 2019-20, una nueva travesía para el Deportivo Alavés que afronta su cuarto año en la máxima categoría del fútbol español en busca de otro paso hacia la ansiada consolidación entre los grandes. Eso sí, los impacientes seguidores gasteiztarras deberán esperar a las 17.00 horas de este domingo para ver debutar a su equipo frente al Levante en Mendizorroza. Pese a la inquietante trayectoria de la pasada temporada en la segunda vuelta, el proyecto albiazul es cada vez más sólido. Sin embargo, el objetivo prioritario sigue siendo aún evitar a toda costa el descenso.
El Alavés arranca el curso tras uno de los veranos más tranquilos que se recuerdan en la capital gasteiztarra desde el regreso del Glorioso a Primera División. A poco más de dos semanas de que se cierre el mercado de fichajes, no ha salido del club ninguna de sus piezas importantes, a excepción de jugadores cedidos como Calleri, Jony o Inui. La columna vertebral de la entidad sigue siendo la misma con Pacheco, Laguardia, Maripán, Martin, Manu García o Tomás Pina como nombres con peso en el vestuario. Una base excelente para que el equipo siga la senda positiva de cursos precedentes en que Abelardo dio con la tecla para hacer del Alavés un grupo muy competitivo frente a cualquier rival.
A ellos se han sumado fichajes rimbombantes como los de Lucas Pérez, Joselu, Pere Pons o Aleix Vidal, junto a Luis Rioja, máximo goleador de la pretemporada con tres dianas, y a otros futbolistas de futuro como Fuchs, Tachi, Verdon o Saúl García. El gran indicador de que el Glorioso está echando sus raíces en Primera es que todos a excepción de Vidal han sido adquiridos en propiedad, tendencia que se inició el verano pasado y que está terminando con la tradicional lluvia de cesiones.
Ataque ilusionante Muchas veces los técnicos deben adaptar su idea futbolística a los jugadores con los que cuentan, y en ese sentido seguro que se van a notar cambios. En la parcela defensiva la base sigue siendo la misma, Pons y Fuchs aportarán nuevas posibilidades al centro del campo y el ataque ha sufrido un lavado de cara total. De hecho, cabe la posibilidad de que los cuatro atacantes titulares en la primera jornada sean debutantes con el Alavés: Aleix Vidal y Luis Rioja por las bandas y la pareja formada por Joselu y Lucas Pérez en la delantera.
De hecho, todas las esperanzas de la afición alavesista están depositada en los dos arietes. Ambos han llegado a la entidad del Paseo de Cervantes en propiedad tras una dilatada carrera en las grandes ligas de Europa. Tanto Joselu, de 29 años, como Lucas Pérez, de 30, se encuentran el cúlmen de su carrera deportiva y han llegado para ofrecer rendimiento inmediato al Alavés. Ninguno de los dos ha tenido protagonismo en el Newcastle y en el West Ham respectivamente en los últimos años, por lo que querrán reivindicarse en la capital alavesa, donde seguro que van a contar con minutos.
Entre los dos sumaron el año pasado 9 goles, los mismos que transformó Calleri, el gran deseado del Alavés, en Primera División en la misma campaña. El sueño de todo alavesista es que Pérez alcance los 17 goles que logró en la temporada 2015-16 con el Deportivo de la Coruña, aunque toda cifra por encima de los diez goles será un éxito rotundo para la secretaría técnica del club.
Tras una pretemporada discreta en cuanto a resultados y pendiente todavía del cierre definitivo de la plantilla con dos futbolistas de corte ofensivo, algo que no podrá hacerse realidad hasta la salida de los seis descartes de Sergio Fernández, una de las notas positivas hasta la fecha ha sido el rendimiento de Luis Rioja. El ex del Almería se encuentra predestinado a seguir los pasos de Pedraza y Jony como futbolista desequilibrante y con capacidad de desborde en la banda izquierda.