Vitoria - La finalización de la concentración en Los Ángeles de San Rafael supone para el Deportivo Alavés la conclusión del primer tramo de la pretemporada. En el ecuador de la preparación, con tres semanas de trabajo ya en las piernas y otras tres por delante para que arranque el nuevo curso, Asier Garitano ya ha podido ver de primera mano a casi todos sus futbolistas -solo quedan por reincorporarse al grupo Mubarak Wakaso y Olivier Verdon tras su participación en la Copa África y un Aleix Vidal al que se espera en las próximas horas en Vitoria para pasar el reconocimiento médico y sumarse al trabajo con el grupo-, una composición de lugar que tiene que conducir a la toma de decisiones para aligerar una plantilla a la que en estos momentos, y aún con fichajes por realizarse, ya le sobran unas cuantas piezas. La primera marcha en oficializarse ha sido la cesión de Adrián Diéguez al Alcorcón, pero a la salida del madrileño le acompañarán algunas más en los próximos días dentro de ese objetivo del preparador de Bergara de ir cerrando el que va a ser su bloque definitivo para encarar la nueva temporada en Primera División.

Con la ayer anunciada contratación de Vidal y la incorporación al grupo de los dos futbolistas africanos, el número de piezas de la primera plantilla -seguramente algún jugador del filial siga en la dinámica de trabajo de Garitano durante esta semana, con Paulino de la Fuente como claro candidato por la importancia que el técnico le ha otorgado en los primeros amistosos- ascenderá hasta veintinueve, cuatro por encima del límite de inscripciones que se pueden realizar cuando, además, aún quedan fichajes por cerrarse hasta el próximo 2 de septiembre. Es evidente que el preparador alavesista tiene aún bastante trabajo por delante a la hora de decidir los descartes.

Hay situaciones bastante claras. Por ejemplo, la que tiene como protagonista a un Ramón Miérez que ha tenido encima la mala suerte de lesionarse en la pretemporada y al que se busca acomodo en Segunda División con el Tenerife como equipo muy interesado. También la idea de dar salida definitiva a Dani Torres se mantiene como firme en las oficinas de Mendizorroza, mientras que la continuidad de Rafa Navarro se antoja también imposible. Eso sí, en otras demarcaciones la competencia se presenta brutal e, incluso, la configuración final de la plantilla podría deparar sorpresas dependiendo de algún movimiento de última hora.

Donde más elementos sobran es en el eje de la defensa y en el centro del campo. La idea del club es mantener a un solo central entre Verdon y Tachi -estos, al igual que Fuchs, pueden actuar con ficha del filial sin computar como jugadores de la primera plantilla-, mientras que el otro saldría cedido a la categoría de plata. En todo caso, la configuración definitiva de esa demarcación se encuentra a expensas de que se concrete si Guillermo Maripán sigue en Vitoria o sale traspasado, situación esta última que podría abrir la puerta también a la continuidad de los tres laterales izquierdos al poder Rubén Duarte actuar como central.

En la zona ancha, además de la deseada marcha de Torres se tienen que producir más movimientos de salida. Un mercado más, la continuidad de Wakaso se encuentra en el aire y la marcha del ghanés abriría de par en par las puertas a la continuidad de Jeando Fuchs. Una zona en la que Javi Muñoz parece haber convencido plenamente a Garitano para ganarse un espacio definitivo en el vestuario.

Fichajes por realizar Cinco son los nombres que actualmente figuran en la nómina de delanteros, una demarcación que podría darse por cerrada con la ya citada cesión de Miérez. Pero solo sobre el papel, ya que la dirección deportiva sigue buscando un refuerzo de garantías en esta zona y el nombre de Jonathan Calleri va a estar sobre la mesa hasta que se acerque el cierre del mercado. Por tanto, entre John Guidetti y Ermedin Demirovic sigue una plaza en juego. Eso por no hablar de la determinación del club de, además de Vidal, contratar un extremo más antes del 2 de septiembre para reforzar las bandas.

Con los números en la mano, de partida Garitano ya tiene que hacer cuatro descartes seguros, con Torres, Miérez y uno de los centrales jóvenes (Verdon o Tachi) como claros candidatos a salir. Cifra que seguramente ascenderá hasta los seis al final del verano si llegan tanto un nuevo extremo como otro delantero más. Y eso sin cerrar las puertas a opciones atractivas que pueda ofrecer el mercado cuando encare su recta final y los clubes potentes busquen la cesión de aquellas piezas que no entren en sus planes.

Un proceso, el de las salidas, que se acelerará en los próximos días, pero que seguramente acabará siendo un goteo hasta el 2 de septiembre. Y es que el Alavés tiene claro que, llegado el momento, hasta que no tenga atado un fichaje no va a proceder a dar una baja.