Vitoria - El Deportivo Alavés dio ayer rango de oficial a una operación adelantada el pasado 13 de abril por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA y en la que venía trabajando con intensidad en las últimas semanas con el acuerdo para pasar a controlar la gestión económica y deportiva del FC Sochaux-Monbéliard, un convenio que se extenderá a lo largo de, como mínimo, las tres próximas temporadas y por el que el club vitoriano será el encargado principal de la toma de decisiones en el club francés, que mantiene su actual estructura de mando y que cede su poder a cambio de ayuda económica para hacer frente a la importante deuda que arrastra y que amenaza la continuidad de su proyecto. Dentro del proyecto de internacionalización del Glorioso que tuvo su primer paso con el convenio con el NK Rudes y el segundo con el pacto con el JS Hercules, el desembarco en el club francés supone un paso adelante de enorme magnitud al entrar de lleno en el mercado francés y pasar a controlar una entidad que históricamente ha sido referente en el trabajo con el fútbol base.
Tras instalarse en Croacia y la zona de los Balcanes con el Rudes y acceder a Finlandia y la península escandinava con el Hercules, el acuerdo de colaboración con el Sochaux supera ampliamente los precedentes al tratarse de un club que histórica y organizativamente se encuentra varios peldaños por encima de los dos convenidos anteriormente. Aunque en la actualidad milite en la Ligue 2 -la segunda categoría de Francia- y arrastre serios problemas económicos, se trata de un club histórico del país vecino y, fundado por la empresa automovilística Peugeot -sus problemas vienen de cuando la marca decidió vender la propiedad a Wing Sang Li, su actual mandatario-, que fue el primero en adquirir el rango de profesional en tierras galas.
Una cantera prolífica Más allá de su palmarés en la máxima categoría (dos veces campeón de Liga y otras dos de Copa como trofeos principales), una de las principales características del Sochaux es su capacidad de trabajo en el fútbol base. En lo que va de siglo, se ha proclamado campeón nacional en categoría sub’19 (2003) y sub’17 (2010) y se ha llevado el título de la Copa Gambardella -un torneo en formato de eliminatorias para los equipos juveniles, de categoría sub’19- en 2007 y 2015. Precisamente, esta última hornada ganadora en categorías inferiores, que también cuenta con varios internacionales en las selecciones de formación francesas, ha alcanzado ya el primer equipo y varios de estos futbolistas que rondan los veinte años figuran ya en las agendas de clubes de relevancia dentro del Viejo Continente.
La idea del Alavés es extender al club galo la política que ha desarrollado ya con Rudes y Hercules. A Croacia y Finlandia ha mandado ya las primeras remesas de jugadores jóvenes para que sigan con su formación y la puerta que se le abre en Francia resulta mucho más interesante al ser la Ligue 2 mucho más competitiva que los otros dos torneos. Como no puede ser de otra manera, el plan pasa por intentar recuperar cuanto antes la plaza en la Ligue 1, para que el nuevo convenido pueda acceder a recursos económicos de superior nivel que le permitan asegurarse la supervivencia de cara al futuro.
La otra parte del acuerdo contempla la opción de que jugadores del Sochaux pasen a formar parte del Alavés directamente, como ya ha pasado con algunas jóvenes promesas del Rudes que se están formando en Vitoria. Se trata de una vía muy jugosa para los albiazules por esa capacidad del club galo de trabajar con su fútbol base y sacar adelante prometedores talentos. Además, el Alavés tendrá la opción de entrar directamente en el mercado francés, uno de los más prolíficos actualmente en lo referido a la formación.- DNA