Vitoria - Manu García fue ayer, sin ninguna duda, el hombre del partido ante el Sevilla. No solo por el golazo que anotó en el minuto 52 (el número 16 que marca con la camiseta del Alavés, cinco de los cuales los ha firmado en la máxima categoría), si no por la influencia que continúa ejerciendo cada domingo en el juego de su equipo. Porque cuando peor estaban las cosas ayer, volvió el capitán a sostener a un equipo que por fortuna, según reconoció, cuenta con un jugador increíble que es su afición. “El equipo hoy ha sabido sufrir y mantenerse firme y esta es sin duda la línea que debemos seguir. Si a eso le sumamos el poderío que nos da nuestra afición debemos estar muy contentos”, valoró el centrocampista vitoriano, que a continuación advirtió lo mucho que queda por recorrer. “Hace dos meses estábamos muy tocados pero ahora estamos vivos y con mucha ilusión para encarar una segunda vuelta que va a ser muy larga y muy dura, por eso tenemos que convertir Mendi en un fortín como hemos hecho hoy. Gran parta de la salvación pasa por ahí”. - A.G.