Vitoria - El guión del partido estaba escrito desde hacía una semana y el resultado apenas varió un ápice. El Alavés rentabilizó el resultado de la ida (1-3) ante el Formentera y selló su pase a los cuartos de final de la Copa con un partido tedioso, repleto de jugadores poco habituales y donde volvió a ganar con goles de Demirovic y Pedraza. Un partido sin mucha historia donde la escuadra albiazul se permitió el lujo de entregar la posesión del balón a su rival, un equipo de Segunda B.
Cuestionado por todo ello y las posibilidades del equipo en la próxima ronda copera, Abelardo abrió el baúl de los sueños para calibrar las posibilidades de su equipo. “¿Ahora? Ahora hay que soñar, hay que seguir soñando porque estamos ya en una ronda muy bonita. Y también a seguir sumando, sobre todo para los menos habituales, como ha ocurrido hoy, donde todos han dado un muy buen nivel, algo que es muy bueno para el equipo de cara al futuro”, valoró el preparador albiazul, que evitó personalizar en ningún jugador. “Me quedo con el esfuerzo y el trabajo de los menos habituales, como ya he dicho. Hemos ido además a más, sobre todo en el segundo tiempo, que ha sido mejor, y además no hemos encajado goles, que es algo que da mucha confianza. Ha sido todo positivo”, abundó el asturiano antes de referirse al Sevilla, su próximo rival en Liga, que llegará el domingo a Vitoria herido después de perder en el derbi ante el Betis (3-5). “Va a ser muy complicado porque es un grandísimo equipo, que está en Champions y cuenta con unos jugadores muy buenos pero jugamos en casa y tenemos una ilusión tremenda. Estamos en racha en Mendi y vamos a tratar de seguir sumando”.