Vitoria - Más allá del pase a los octavos de final de la Copa, una clasificación redentora que ayudó a bajar algunos grados la temperatura que estos días hay en el vestuario albiazul, sin duda la mejor noticia de la jornada fue el debut del canterano Martín Agirregabiria, un chaval de 21 años que juega en el filial albiazul, que se ha pasado media vida entrenándose en Ibaia y que ya desde la pasada temporada estaba pidiendo a gritos una oportunidad para debutar con el primer equipo. De la mano de Mauricio Pellegrino estuvo a punto de hacerlo el año pasado cuando una lesión de Raúl García llevó al técnico argentino a tirar de cantera para completar la convocatoria ante el Leganés. Aquella tarde, El Flaco apostó por reubicar a un veterano en el lateral y el joven Martín tuvo que conformarse con experimentar las sensaciones de la Primera División desde el banquillo. Como quiera que su carácter inconformista representa el motor que le ha permitido alcanzar sus metas, continúo trabajando sin descanso en el conjunto filial primero a las órdenes de Aitor Orueta y después con Igor Oca, esperando una nueva oportunidad que, esta vez sí, llegó de verdad. Sin laterales derechos específicos y con la lesión a última hora de Carlos Vigaray, fue el interino Javi Cabello quien comunicó al canterano al filo de las 13.00 horas que jugaría como titular. Un subidón de esos que se recuerdan de por vida y una llamada al aita, que solo recomendó a su hijo una cosa, “sé tú mismo”. Y vaya si lo hizo. Desde que arrancó el partido, apenas hubo rastro de ese chaval de 21 años y sí del jugador con muescas de veteranía que ni se amedrentaba en defensa ni se cansaba de encarar una y otra vez a sus rivales, prodigándose y caracoleando en acciones ofensivas cercanas al área que, por momentos, llegaron a recordar a las que en su día protagonizó el probablemente mejor lateral derecho en la historia del club, Cosmin Contra. De tremenda potencia y sorprendente desparpajo, el joven Martín es probable que vuelca a ser de la partida el lunes ante el Girona. Las bajas de Alexis y Vigaray volverán a abrir las puertas de Primera a este joven vitoriano que tiene contrato hasta 2019 y que, hasta ayer, ha jugado 12 partidos (1.026 minutos) en el filial de Tercera División. “Nunca dejé de creer; solo era cuestión de esperar la oportunidad”, se felicitó ayer.