Vitoria - Una de las principales características con la que los que le conocen adornan a Gianni De Biasi es su capacidad para ejercer de psicólogo dentro de un vestuario y activar la motivación de sus jugadores. Si al estilo y a las palabras hay que recurrir, el técnico italiano evidenció durante su puesta de largo como nuevo entrenador del Deportivo Alavés que es un hombre con capacidad de tocar la fibra de los que se encuentran a su alrededor.
“Me gusta ser un motivador porque en la vida la motivación es la diferencia. Con eso, tú puedes hacer lo que otra gente no puede, aunque solo eso no es suficiente y hacen falta más cosas que voy a decir dentro del vestuario. Creo que con las ganas de los chavales se puede invertir esta situación y todos juntos podemos llegar a la salvación del equipo. Conservar la categoría es ganar nuestra liga y todos trabajaremos por ello. Necesitamos que cada uno dé un poquito más de lo que ha dado hasta ahora, sin hacer diferencias. Conmigo, todos parten de cero y juega quien lucha, quien no deja nada y quien está comprometido con el equipo. El individuo te puede echar una mano, pero es el equipo el que gana”, señaló el técnico, que incidió muchísimo en el colectivo.
“Les voy a tratar de convencer de que todo se puede alcanzar en la vida, que se puede llegar a donde quieras. Nosotros no queremos ganar la Liga, queremos llegar al cuarto puesto por la cola. Ese es el objetivo, no hay más. Y no es difícil, no estamos lejos. Tenemos que cambiar la mentalidad, mirarnos a los ojos entre nosotros y pensar que podemos conseguir nuestro objetivo trabajando y siendo una piña. Tenemos que ser un equipo con todas las características de este pueblo, de esta comunidad con gente trabajadora a la que nadie le ha regalado nada en la vida”, remarcó el nuevo técnico albiazul.
Para De Biasi la situación de coger un equipo en una mala situación clasificatoria no es nueva, ya que durante su larga trayectoria en Italia se acostumbró a salvar del descenso a varios clubes. Milagros del fútbol que, aún con tiempo por delante, quiere protagonizar de nuevo en su andadura en Vitoria: “En Italia siempre he luchado por la salvación y siempre la he conseguido. La pasada campaña todo el mundo daba por descendido al Crotone y al final se salvó porque todos, equipo, afición, utileros... todos estaban de la misma parte y empujaban juntos. No tenían los mejores jugadores del mundo, pero tenían las ganas de llegar al objetivo y ese es nuestro reto. El orgullo y la dignidad no tienen precio y cuando saltamos al césped jugamos por nuestra dignidad. No salimos al campo para perder”.
Equipo camaleónico El preparador de Sarmede escondió cartas con respecto a lo táctico, señalando que quiere “un equipo camaleónico” que sea capaz de adaptarse con sus armas a la exigencia de cada partido. “No podemos jugar todos los partidos de la misma manera, tenemos que ser camaleónicos pero con una mentalidad de ganar todos los partidos. Tenemos que trabajar y tratar de ganar siendo más listos que los rivales, táctica y mentalmente. Hay que trabajar para meter en dificultad a los rivales. El sistema de juego es dinámico. En el papel todo está correcto y funciona bien, pero es el equilibrio del equipo el que hace la diferencia. El compromiso, saber de antemano lo que quieres hacer... Esto es lo importante”, dijo.
Por último, De Biasi señaló que los encuentros contra Deportivo y Real Madrid tienen que tomarse como base y línea a seguir, aunque cambiando los resultados: “El equipo me gustó muchísimo el sábado y también en A Coruña, aunque no tuvo suerte. Allí se pudo sacar un punto y contra el Real Madrid fue un partidazo, con dos postes que podían haber sido gol y metiendo en dificultad al contrario. Lo primero que hay que cambiar son los resultados, aunque eso no llega por sí solo. Necesitamos mejorar, con compromiso, sabiendo que no somos fenómenos sino jugadores normales que, dentro de un equipo con mentalidad y organización, pueden conseguir todo lo que quiera”.