Como era de esperar en un partido trufado de incertidumbre, miedos e imprecisiones, el que logró abrir la hucha fue el que finalmente se llevó la recompensa. Pepe Mel salvó su cuello a costa de un novato Javi Cabello que si bien imprimió un estilo de juego algo más reconocible en la primera mitad y dotó al plantel de una actitud elogiable, al final no tuvo más remedio que asumir la derrota, la quinta consecutiva en lo que va de liga, y comprobar además que su equipo continúa negado de cara a gol. Jamás en la historia de Primera un equipo se había quedado sin sumar puntos ni goles disputada la quinta jornada. Para su desgracia y deshonra, el Alavés ostenta ya en dicha historia el penoso honor de ser el primer conjunto en conseguirlo.

Pero así están las cosas ahora mismo en el vestuario albiazul. Una pesadilla de consecuencias insospechadas por la que el preparador albiazul pasó de puntillas en su comparecencia de prensa, donde dirigió todos y cada uno de sus mensajes a levantar la moral de la tropa. Consciente del papelón que ayer tenía sobre la mesa, Cabello dulcificó la quinta derrota de la temporada y el penoso juego de la segunda parte, un paso más hacia un abismo imparable. “El equipo ha tenido mucho pundonor y coraje y hasta el último momento ha vendido cara la derrota, algo que es un paso adelante pero que no es suficiente. Tenemos que transformarlo en un resultado a favor”, se arrancó el técnico antes de tratar de encontrar una explicación a la desigual e incomprensible imagen que el equipo dio en la segunda mitad respecto a la primera. “Creo que las ansias de querer empatar nos ha jugado una mala pasada, pero sí es cierto que hemos perdido ese punto de concentración y lo hemos sustituido por el corazón... Pero con el balón en nuestro poder no hemos tenido continuidad y el partido se ha convertido en un ida y vuelta. Nos ha faltado ese plus para tener alguna opción más”, abundó Cabello.

“un derroche intenso” Cuestionado a continuación sobre al estado anímico de los jugadores, el entrenador trató de fotografíar la estampa tras el partido. “El equipo ha hecho un derroche inmenso y los jugadores han dado todo lo que tenían y me siento muy orgulloso de cómo han dado la cara, así que es normal estar así... Pero se trata de levantarse ahora y con esta actitud estoy convencido de que le vamos a dar la vuelta a la situación porque algún día las ocasiones entrarán”.

ely y manu garcía Por su parte, los jugadores tampoco quisieron ocultaron su malestar. “No podemos dejar un centímetro al otro equipo porque nos hacen un gol y luego también está la mala suerte.. Pero tenemos liga y hay margen para crecer y competir sobre todo, que siempre ha sido la seña de identidad de este equipo”, advirtió Rodrigo Ely. Por su parte, mucho más crítico fue el capitán, Manu García, que no se anduvo por las ramas: “No hemos tenido acierto y así es muy complicado. Sin gol no hay nada que hacer porque en el fútbol, el gol es lo que marca la diferencia. Pero tenemos que seguir, no nos queda otra, y esto se arregla ganando este sábado al Real Madrid”.